La calma chicha que reina en el país encrespa los nervios de los estudiosos del comportamiento electoral, al preguntarse: ¿Por qué con la magnitud de la crisis la gente no reaccionan? En ese sentido he visto que, todavía, hay gente chavistas y no chavistas que apuestan a su superación, por alguna vía, quizás en una actitud de negación o que a mí no me puede pasar eso, otros viven de ella, también hay, como yo, que han logrado surfearla con lo ahorrado, otros en el bachaqueo y la viveza…una sociedad descompuesta, individualista que desprecia la política.
Por ello he sostenido que allí deben ir dirigidos los esfuerzos de cambio en la sociedad venezolana, hacia la cohesión en el logo de objetivos comunes, que reivindique la acción Política. El venezolano entendió la democracia como voto y hago lo que me da mi gana, pero esa participación ha bajado muchísimo porque la gente siente que el voto, por desconfianza en el CNE, los partidos imponen candidatos en cogollos, no hay confianza en nadie ni en nada…, no es un instrumento de cambio.
Frente a esa realidad han surgido partidos políticos que han pretendido cambiarla, de un lado de acera: La Causa Radical, Convergencia, Primero Justicia, Voluntad Popular… y de la otra: MVR, PSUV y sus aliados, pero cuando logran el poder, gracias al voto de la sociedad, se comportan igual o peor que los históricos AD y Copey. La historia devela que el planteamiento de cambio hacia tomar en cuenta al ciudadano tiene éxito, pero también nos dice que fracasa cuando se hacen en una actitud gatopardiana de cambiar, para no cambiar nada. En un manejo burdo y grosero que sólo tiene por norte el beneficio personal y no el colectivo.
Ese comportamiento nos ha conducido a la actual crisis. En hoy y en al ahora, es indispensable crear una fuerza de cambio en la que la gente pueda confiar, que logre vencer la desesperanza. Parafraseando a Einstein si seguimos haciendo lo mismo tendemos los mismos resultados…expresión que repite mucho mi hermano Juan Carlos Salazar, y con la que concluyó su discurso de presentación de una formula ciudadana para el Concejo Municipal de Urbaneja, para estas elecciones de diciembre 2018, la Concejal María Alejandra Malaver.
Una experiencia inédita en la que se conjuga un cambio en la forma de hace política desde las comunidades para la solución de sus problemas. En una comunidad maltratada por propios y extraños, un grupo de ciudadanos sin militancia partidista asumen el rol de liderazgo colectivo que exige el momento político. Cuando el trabajo comunitario cobra fuerza y se valora en su justa dimensión, la Política. No es una acción anti partido, es una acción pro democracia, pro discusión, pro debate público, pro defensa de lo que es de todos, pro bien común…no pretenden desplazar a las organizaciones partidistas pero sí exigirles más conexión con las necesidades de la gente, por eso mi apoyo y contribución.
@carlotasalazar