Este miércoles, la Gran Alianza Nacional, GANA, emitió un comunicado, mediante el cual denuncia un plan para impedir la conformación de un gobierno de emergencia, reseñó nota de prensa.
Seguidamente el texto completo del comunicado:
En el marco de la 73° Asamblea General de la ONU se tomaron decisiones de gran importancia para nuestro país, entre las cuales vale la pena resaltar las siguientes: Se aprobó el protocolo de la “Responsabilidad de Proteger a los Pueblos”; siete países acusaron al gobierno venezolano ante la Corte Penal Internacional por delitos de lesa humanidad; el Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobó una resolución sobre la crisis humanitaria en Venezuela; Donald Trump advirtió que “todas las opciones están sobre la mesa” con respecto a Venezuela; el Vicepresidente norteamericano, Mike Pence, anunció que los EE.UU. respaldaría militarmente a Colombia ante una agresión armada venezolana; y senadores estadounidenses solicitaron que se designe a Venezuela como un “Estado patrocinador del terrorismo”.
Estas graves denuncias y amenazas están ocasionando una fractura dentro del PSUV y dentro de las propias Fuerzas Armadas, porque los aliados de Maduro no están dispuestos a inmolarse junto con él. Esta oportunidad debe ser capitalizada por la oposición para lograr un pronto cambio de gobierno.
Para lograrlo, el próximo paso, luego de que Maduro fuera destituido por el caso de Odebrecht –ante la omisión legislativa y para llenar el vacío de poder–, consiste en que el TSJ Legítimo designe un gobierno de emergencia. Un gobierno de emergencia que cuente con el apoyo mayoritario los venezolanos y de la comunidad internacional. Un gobierno de emergencia que canalice el apoyo humanitario que tanto necesita Venezuela, para disminuir el sufrimiento de nuestro pueblo: el hambre, las enfermedades, la escasez, la inflación, y muchos otros males que nos afectan.
Sin embargo, en este punto se presenta un lamentable obstáculo, que nos vemos en la obligación de denunciar ante el país: algunos partidos opositores están saboteando el nombramiento de ese gobierno de emergencia, porque afirman que solo ellos tienen la legitimidad para gobernar. Dicen que han luchado mucho durante estos años, y que sería injusto que unos “outsiders” vengan ahora a capitalizar el cambio político.
Los partidos se niegan a reconocer que se equivocaron, al orientar la lucha exclusivamente al ámbito electoral, cuando estaba claro que el régimen jamás saldría por los votos. Y se niegan a entender que en este momento histórico se requiere de un gobierno supra partidista, que se encargue de depurar los poderes públicos, neutralizar los grupos armados y enfrentar la emergencia económica; luego de lo cual –entonces sí– vendría el momento de los partidos, que competirían por el poder en una elección libre y transparente, con un CNE independiente.
Pese a las grandes diferencias entre 1958 y la situación actual (en aquel entonces no había mafias del narcotráfico, ni injerencia cubana, ni vínculos con las FARC o el Hezbollah), proponemos un gobierno de emergencia como el encabezado por el Vicealmirante Wolfgang Larrazábal, que depuró los poderes y convocó a elecciones generales.
Los partidos no deben obstaculizar el trabajo del TSJ Legítimo, no deben sabotear el nombramiento de un gobierno de emergencia. Por el contrario, deben abandonar temporalmente sus legítimas aspiraciones hasta que se recupere la democracia y estén dadas las condiciones para unos comicios justos.
Enrique Aristeguieta Gramcko
Presidente de la Gran Alianza Nacional (GANA)