Científicos daneses y alemanes han identificado el origen de la maldad humana en una investigación que han denominado “factor oscuro de la personalidad” o “factor D”.
LaPatilla.com
El estudio, publicado en el portal de la Universidad de Copenhague señalan que el “Factor D” es la tendencia del individuo a poner los intereses personales por encima de cualquier otro interés, sin tener en cuenta la manera malintencionada o el daño que puedan causar a los demás.
El “factor oscuro de la personalidad” se expresa cuando algunas personas disfrutan haciendo daño a los demás y no llegando a sentir ninguna sensación de culpa o vergüenza. En dicha investigación, se aportan una serie de rasgos frecuentes en los individuos que experimentan esta tendencia y lo agrupan en nueve:
El egoísmo, donde se describe a la persona con preocupación excesiva hacia sí mismo.
El maquiavelismo, actitud manipuladora e insensible hacia los demás. Afianzado en la convicción de que “el fin justifica los medios”.
Desconexión moral, procesamiento cognitivo que hace a la persona comportarse de manera inmoral sin sentir vergüenza por ello.
El narcisismo, descrito como auto-admiración excesiva. Acompañado de un sentimiento de superioridad y una necesidad extrema de llamar siempre la atención.
Derecho psicológico, la concurrida creencia de “soy mejor que los emás” y por lo tanto merece ser tratado mejor
Sadismo, deseo de infligir daño mental o físico a otras personas, solo por placer.
Interés propio, deseo de promover y resaltar el propio estado social y financiero.
Rencor, deseo de causar daños a los demás, sin importar que el proceso se hagan daño a sí mismos.
Ingo Zettler, autor principal de esta investigación, explica en un comunicado que, en una persona determinada, el Factor D puede manifestarse principalmente como narcisismo, psicopatía, o una combinación de varias. “Nuestra gráfica del denominador común de los diversos rasgos oscuros de la personalidad, permite establecer que determinada persona tiene un Factor D alto. Esto se debe a que el Factor D indica la probabilidad de que una persona participe en el comportamiento asociado con uno o más de estos rasgos oscuros “, detalló.
Esto en la práctica significa que una persona que exhibe un comportamiento malévolo, que le gusta humillar a otros, por ejemplo, tendrá una mayor probabilidad de participar también en otras actividades malévolas como hacer trampas, mentir o robar.
Para llegar a estas conclusiones, los investigadores encuestaron a más de 2 mil 500 personas a las que, a través de una serie de preguntas relacionadas con los comportamientos oscuros, estudiaron sus actitudes hacia la agresión o la impulsividad y sus comportamientos egoístas y poco éticos.