ALTO
¡TOMA TU TOMATE!:
El canal oficial rojo rojito, VTV, interrumpió en estos días su programación para hacer un pase en vivo desde la reunión que celebraban varios ministros y funcionarios del gobierno de Maduro, presidida por la vicepresidenta Delcy Rodríguez, con los representantes de la República Popular China en materias referentes al programa de “Recuperación Económica” implementado desde Miraflores. El ministro de Agricultura y Tierras Wilmar, Castro Soteldo, le hizo un par de preguntas a los “expertos chinos”. Una referente a “los mecanismos de control que el gobierno chino implementó al sector productivo para garantizar la eficiencia y la productividad de los distintos sectores de la producción” y otra sobre el intercambio entre el Yuan y el Petro. El vocero del grupo de asesores chino fue enfático al responder diciendo que “el 90% de las empresas en China son privadas. El gobierno no puede ejercer ningún control a ellas. El gobierno puede implementar un sistema de incentivos, o acicate, para que las empresas privadas puedan elevar la productividad y mejorar la eficiencia y así puedan ganar mas. Las empresas privadas pueden trabajar con las políticas industriales del gobierno y éste puede ofrecerles asistencia y los subsidios necesarios. Así algunas empresas buenas, que tanto necesitamos, pueden desarrollarse con más rapidez”. Al ver el desconcierto entre los participantes rojos que quieren controlar ineficazmente todo lo que se produce en Venezuela fue la propia Delcy la que interrumpió la transmisión para que no se siguiera conociendo la enorme diferencia entre el tratamiento chino y el venezolano a quienes producen desde el sector privado. Se fueron a un corte y no se supo mas nada del tema.Ni siquiera transmitieron la respuesta sobre la criptomoneda. Una muestra mas de lo absurdo del programa dizque de “recuperación económica” y el terror de que se sepa la verdad china sobre el tratamiento a los empresarios. Está por llegar ahora una delegación de Rusia para ayudar en la reestructuración económica. Ellos también tratan muy bien a los empresarios privados. Ojalá aprendan estos capitostes sin lustre alguno y con abundante ignorancia, para bien de todos …
MEDIO
El analista, consultor político y electoral, Jesús Seguías (@seguias1) hizo un Microanálisis sobre la motivación electoral brasilera en la reciente elección del líder de la ultraderecha Jair Messias Bolsonaro. Brevemente expuso en 10 puntos la realidad suramericana con dicha escogencia brasileña: “1. El expresidente brasileño Fernando Henrique Cardoso resume de manera muy clara quién es Bolsonaro: “El capitán retirado del ejército Jair Bolsonaro es un oscuro parlamentario, apoyado por un partido casi inexistente, el PSL (Partido Social Liberal)…Con un fuerte cariz autoritario… Bolsonaro es una hoja seca impulsada por el vendaval de todas estas transformaciones. Simboliza el ansia del orden ante el miedo a lo desconocido… Presenciaremos la “barbarie”. No se trata de la vuelta al fascismo: la historia, en este caso, no se repite. Se trata de otras formas de pensamiento y acción no democráticas.” 2. El desconocido Bolsonaro, sin el respaldo de un partido poderoso y con muy pocos recursos económicos, interpretó lo que sienten los brasileños ante la inseguridad ciudadana, la crisis económica, y la podredumbre ética de los políticos gobernantes (Venezuela Dixit). 3. También interpretó el rechazo de los brasileños a la sociedad parasitaria estimulada por gobiernos izquierdistas que reparten mucho a los pobres sin preguntarse “quién paga la cuenta”. Bolsonaro quiere una sociedad productiva no parasitaria. Y eso hizo clic. 4. Tengo varios años diciendo que “cuando los políticos de oficio fallan, los pueblos inventan”. No importa si la opción es de izquierda o de derecha, con tal escuchen al pueblo y pongan mano a una narrativa poderosa. Y Jair Bolsonaro es otro invento más. 5. La sociedad mundial, especialmente en América Latina, tiene rato inventando opciones diferentes a los partidos congelados en la historia, anclados en paradigmas que ya no dicen nada a los ciudadanos, y que no responden a las exigencias del nuevo elector. 6. El teniente coronel y golpista Hugo Chávez fue quien rompió el celofán en Venezuela y en el continente. De allí en adelante observamos que los bolivianos “inventaron” a un indígena cocalero, los paraguayos a un cura, los brasileños a un dirigente sindical, los uruguayos a un ex-guerrillero medio hippie (pero brillante), los chilenos a un empresario multimillonario, los panameños a otro empresario, los haitianos a un cantante, los guatemaltecos a un cómico, los mexicanos a un izquierdista suigéneris, los estadounidenses a un negro, y luego de éste a un empresario multimillonario que sabe muy poco de política. 7. En fin, los pueblos decidieron enviar a la porra a todos los partidos políticos clásicos e históricamente poderosos, o al político tradicional (caso EE.UU.). Y todavía existen políticos en Venezuela que no copian estas señales muy claras e irreversibles de la historia. Siguen encapsulados en sus proyectos personales (de paso, torpemente administrados). 8. Los casos de Brasil y Venezuela son diferentes en este momento. Bolsonaro está siendo electo en un país que aun conserva transparencia electoral y democrática. Venezuela ya no.
9. Pero sí hay algo en común: un pueblo que exige respuestas a políticos que no tienen nada qué decir, que sólo se limitan a hacer denuncias y más denuncias, y a buscar que otros le hagan la tarea, pero que no hacen clic con la mayoría de la población. La pereza política es impresionante. Son fuerzas (¿o debilidades?) políticas sin pasión, sin liderazgos, sin respuestas, sin nada. Pero eso no es lo más grave. Lo más grave es que siguen haciendo más de lo mismo esperando obtener diferentes resultados. Gobierno y opositores por igual. Odian el cambio. Eso es peligroso.
10. Los brasileños pasaron -de un solo jalón- del socialismo moderado al capitalismo autoritario y amante de las dictaduras “de derecha”. Dicho a tiempo”.
90% A CENTRO Y DERECHA:
El venezolano Francisco J. Monaldi, dedicado a la economía política, la energía y el petróleo aseveraba tras dicha elección que “las seis mayores economías de América Latina, que representan el 90% del PIB regional, han elegido gobiernos de centroderecha o de derecha. Brasil, Argentina, Colombia, Chile y Perú. México es la única economía importante de Latinoamérica moviéndose en sentido contrario”. Añádale que para la toma de posesión de López Obrador ya anunció Maduro su presencia.