Advertencia: las imágenes que ilustran este artículo pueden herir la sensibilidad de algunas personas. Porque no están ante una escena de una película de miedo, ni tampoco frente a un terrorífico disfraz de Halloween. Muy al contrario, la tendencia que hoy les mostramos produce más escalofríos que la noche de los muertos vivientes. Y las modelos que mostramos en esta página llegan a asustar más que los fantasmas. Por muchos colores candy (tonos dulces) que luzcan, publica abc.es.
Por Teresa de la Cierva
Tras la espeluznante moda de colocarse los llamados grills (o protectores de dientes) de oro o con brillantes (Madonna, Katy Perry o Miley Cyrus fueron las culpables de una tendencia tan pernicionsa como extendida) ahora Instagram intenta convencernos de que teñirse los dientes de colores ya es el último grito en cosmética.
En la estela del tatuaje
«Esto es algo que se irá convirtiendo en algo habitual, como sucedió con los tatuajes», afirma en una entrevista a «The New York Post» David Silverstein, el creador de la marca Chrom Temporary Tooth Polish, la firma de maquillaje dental que está detrás de esta moda. Silverstein está convencido de que llevar la boca multicolor se volverá tan popular como llevar las uñas pintadas. «Chrom es como el esmalte de uñas para los dientes», afirma. Y pretende convencernos de que es una gran idea «embellecer» nuestra sonrisa con tonalidades pastel como «Sunshine», «Fairy Dust», «Mint» o «Pretty in Pink». «Tenemos muchos colores diferentes y queremos que experimentéis, que no temáis: mezclad y divertíos. Después de todo, el maquillaje no es para encajar, es para destacar», se puede leer en su web.
Su intención es que nos coloreemos los dientes a juego con las uñas o el color de nuestro cabello. Y se ha quedado tan pancho. «Es una idea brillante», ha declarado con «humildad» Silverstein. Y asegura que sus sonrisas «arco iris» ya se ven habitualmente en los festivales de música. Lo único sensato de esta locura es que dicen que las pinturas dentales están formuladas por dentistas con pigmentos similares a los colorantes de alimentos, 100% «comestibles» y que cumplen con la Ley de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos de EEUU.
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Flash your pearly pinks with CHROM tooth polish in Candy Floss. Link in bio.
Estructura porosa
Aunque garantizan que no manchan los dientes, Dori Sánchez, higienista de la Clínica Rosales de Estética Dental alerta de que puede ser así cuando el esmalte está perfecto, «pero el diente es una estructura porosa y en personas con una dentina expuesta o cierta predisposición a que las manchas se fijen en las zonas interdentales, precaución. Ya bastante tenemos con la cantidad de colorantes alimentarios que nos manchan los dientes como para añadir estos».
Los dentistas Luis Calatrava y Beatriz Serrano de Haro añaden que «no sabemos el ph que tiene ese colorante y cómo interactúa con un tejido vivo como es el diente, pudiendo causar daños al esmalte. Tampoco existen investigaciones científicas ni estudios serios que corroboren que no es dañino. Y, además, toda cavidad oral tiene una enorme capacidad de absorción y habría que preguntarse cuál es la toxicidad de estos colorantes para mucosas y demás elementos del aparato estogmatignatico».
Los tintes en cuestión se retiran con un cepillado de dientes, pero presumen de que pueden resistir hasta 24 horas comiendo, bebiendo e incluso besando. ¿De verdad piensan que querrá alguien besar una de estas bocas multicolor?