Rachel Dale no controló su furia. Enferma de celos tomó su teléfono celular, abrió el perfil de Instagram de su empresa -donde tiene miles de seguidores- y comenzó a publicar fotos de su ex novio, Alex Montgomery, con su amante. Sin filtro. Sin pensar.
Por Infobae
El día en que cumplía 28 años, Dale había descubierto en el smartphone de su novio las imágenes explícitas de él junto a su amante. En todas estaban teniendo sexo. Naturalmente, enloqueció. Y sin pensar comenzó a publicar las fotografías: “Estarán en toda la internet mañana”, le dijo a su ex.
Fueron apenas ocho minutos desde que se dio cuenta que había cometido un error. Dale las borró en ese tiempo. Pero ya era tarde. De inmediato las imágenes comenzaron a circular por toda la web. Redes sociales y foros, comentando la brutal pornovenganza.
Al verse teniendo sexo en diferentes plataformas, la amante de su novio entró en desesperación e intentó quitarse la vida. Fue trasladada de urgencia a un hospital donde fue atendida. Hasta ese extremo había llegado la venganza irracional de Dale.
Ashley Seetal, el fiscal que investigó el caso, explicó la gravedad de lo hecho por la empresaria de la industria de la moda. “Las imágenes gráficas y de un área íntima se compartieron con una serie de chats grupales y chats de redes sociales. Las fotos fueron subidas durante diez minutos, se retiraron y se volvieron a cargar inmediatamente la tarde siguiente. La víctima intentó quitarse la vida, fue un intento serio y la llevaron al hospital y recibió tratamiento. Hay evidencia de graves problemas y graves daños psicológicos”.
A todo esto, Montgomery explicó que la víctima había sido su amante pero años atrás, antes de que él conociera a Dale. Sólo mantenía las fotografías con él, sin pensar que algún día provocaría un problema tan serio.
El abogado de la empresaria, Gevin Clarke, dijo en su defensa: “Ella ve estas imágenes, imágenes gráficas y explícitas… y variadas. Está devastada, está mortificada. Son subidas a una cuenta de Instagram con entre 1.500 y 1.600 seguidores. Fueron publicadas entre 8 y 9 minutos a las 7.30 am. En términos de cuánta gente las vio, va a ser extremadamente limitada. Acepto que hubo cierta humillación pero esto es muy diferente a una revancha, esto fue una furia del momento”.
Para la Corte del Gran Manchester la revancha y el delito existieron. Fue sentenciada a 12 semanas de cárcel y apenas 200 libras por los gastos, de acuerdo al diario DailyMail.