“El humo me está quitando la vida, no me deja vivir”, es lo que manifiesta en medio del desespero Sandra Fernández de 62 años, quien tiene un solo pulmón trabajando. La humareda le quita cada vez más su aliento.
Por: Panorama
La habitante de la urbanización La Gloria, parroquia Francisco Eugenio Bustamante al oeste de Maracaibo, sufre junto a 198 familias, por la inmensa cantidad de humo, producto de la quema constante de desperdicios sólidos, de un vertedero improvisado a escasos metros de la urbanización.
“Yo tengo que dormir con un tapabocas, las medicinas están demasiadas caras para andar enfermarse, pero ¿Cómo hace uno si la enfermedad te sigue a tu casa?”, expresó Rosa Segovia de 47 años.
Según los vecinos los más perjudicados son los niños. “Yo me tengo que encerrar en el cuarto con mis bebes. No tenemos aire acondicionado y el ventilador no puede combatir con el intenso calor. Aún así prefiero pasar calor, que tragarme toda neblina apestosa”, dijo Maira Mendoza.
“Uno intenta hablar con los volteos para no boten la basura acá, pero la respuesta es que supuestamente los manda la alcaldía”, dijo un afectado, que asegura que cada día llegan más camiones arrojando basura que recolectando los montículos de desechos.
Desde hace un año la comunidad tiene este problema, que ha ocasionado algunos habitante terminen por abandonar sus hogares por no poder respirar.