El mexicano Juan Pedro Franco, considerado el hombre más obeso del mundo, fue sometido con éxito a una cirugía en la que le colocaron una banda gástrica con la finalidad de mejorar su salud pues pesa 304 kilogramos, informó hoy su doctor, José Antonio Castañeda.
En 2017, el joven de 32 años, originario de Aguascalientes, pesaba cerca de 590 kilos cuando se puso en manos de Castañeda, quien lo sometió a una dieta mediterránea que hace énfasis en las verduras y en las frutas para luego hacerle dos operaciones: una de manga gástrica y otra de bypass gástrico.
Tras ello, Franco logró una disminución de 49 % de su peso inicial. “Sin embargo, aún requiere tratamiento para agilizar su pérdida de peso y el control de sus comorbilidades”, indicó en un comunicado Gastric Bypass México, un grupo médico especializado en el tratamiento de la obesidad con sede en Guadalajara, estado de Jalisco.
De acuerdo con Castañeda, la banda gástrica es una cirugía de tipo restrictiva, que consiste en la colocación de un dispositivo alrededor del estómago que ayuda a restringir la cantidad de alimentos que ingresan a él.
“No queremos decir que Juan Pedro no sigue su tratamiento nutricional, pero consideramos que esta herramienta puede ayudarlo mucho más a perder peso en los próximos meses”, dijo el especialista.
Castañeda recordó que, pese a la pérdida de peso, el paciente se mantiene en la clasificación de una persona con obesidad mórbida, con un Índice de Masa Corporal (IMC) de 88.
“Este procedimiento no se contempló desde un inicio porque no se puede realizar en pacientes con el nivel de exceso de peso que tenía Juan Pedro”, dijo el médico.
Ahora se espera que tras esta operación, Juan Pedro pierda 150 kilogramos más y que con eso mejore la condición de su edema (hinchazón debido a la acumulación de líquido) de extremidades inferiores, porque representa un peso importante. “En tórax y extremidades inferiores tiene mucho edema aún”, señaló el doctor.
El especialista refirió que gracias a las dos cirugías anteriores, este joven que había permanecido en cama sin poder pararse durante siete años ahora puede caminar, practicar ejercicios diariamente, desplazarse por su casa y bañarse sin la ayuda de su madre.
Además ha reducido las dosis de medicamentos que tomaba para la diabetes y la hipertensión, y ha abandonado el tanque de oxígeno que lo ayudaba a respirar.
Castañeda dijo que es posible que en dos semanas Juan Pedro vuelva a Aguascalientes, luego de dos años de vivir en Guadalajara, aunque deberá volver a esa ciudad con periodicidad para el ajuste de la banda gástrica y el seguimiento del equipo multidisciplinario, en el que hay nutriólogos, psicólogos y activadores físicos.
EFE