Boca Juniors rechazó la noche del jueves el fallo del Tribunal de Disciplina de la Conmebol que dispuso reprogramar el partido de vuelta de la final con River Plate por la Copa Libertadores 2018 y anunció que apelará ante una instancia superior, e incluso ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS).
AFP
El anuncio implica que Boca seguirá reclamando que le den por ganado el encuentro que tuvo que suspenderse en el estadio Monumental riverplatense, el pasado fin de semana, por lesiones sufridas por sus jugadores en un ataque de hinchas rivales.
La entidad azul y oro dijo en un comunicado que “no comparte los argumentos” de los jueces y que llevará el caso “ante la Cámara de Apelaciones de la Conmebol y, eventualmente, ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS)”.
Boca dijo que “no cabe otra sanción que la solicitada en nuestras presentaciones (el otorgamiento de los puntos y la consagración como ganador de la Copa)”. La Conmebol ha reprogramado el partido de vuelta de la final para el 9 de diciembre a jugarse en el estadio Santiago Bernabéu en Madrid por razones de seguridad.
El partido de ida, disputado el 11 de este mes en el estadio la Bombonera, finalizó 2-2 y sin incidentes. “El club insiste en que, habiendo quedado acreditado con pruebas concluyentes el brutal ataque al micro del plantel sufrido el pasado 24 de noviembre de 2018, en las inmediaciones y hasta el portón de ingreso del estadio Monumental, no cabe otra sanción que la solicitada en nuestras presentaciones”, señaló.
Al reafirmar la postura ya expresada de reclamar los puntos por agresión a sus futbolistas, Boca reclamó “que se cumpla debidamente con el reglamento” y que se consideren “la gravedad de las conductas y el carácter de reincidente del club organizador del evento”. Uno de los argumentos presentados por la entidad de la Ribera del Riachuelo fue que ante un incidente similar se lo descalificó de la Copa en 2015.
En aquel año disputaba una llave de octavos de final de la Libertadores. Boca fue castigado por el Tribunal de Disciplina de la Conmebol a raíz de una agresión con gas pimienta sufrida por jugadores de River en la manga de entrada a la cancha de la Bombonera para jugar el segundo tiempo del partido de vuelta. Estaban 0-0 y en la ida había ganado River 1-0.