Después de Reporteros Sin Fronteras, el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ) deploró este miércoles las amenazas crecientes a las que se enfrentan los periodistas en todo el mundo, con casi el doble de asesinatos selectivos en 2018.
Según el CPJ, 53 periodistas murieron entre el 1 de enero y el 14 de diciembre de 2018, frente a 47 en 2017, pero del total 34 fueron asesinatos selectivos en 2018, incluyendo el del editorialista saudita Jamal Khashoggi, contra 18 el año pasado.
En cambio, la cifra de periodistas muertos en conflictos está en su nivel mas bajo desde 2011, con 13 muertos en 2018, según el CPJ, que explica la baja en parte por la dificultad de acceder a conflictos como el de Siria o Yemen.
El balance del CPJ, con sede en Nueva York, es inferior al publicado el martes en París por RSF, que denuncia 80 periodistas muertos en 2018, en un conteo que incluye también a no profesionales y a colaboradores de medios de comunicación que no son periodistas.
A pesar de eso, las conclusiones de las dos organizaciones confluyen.
Según ambos organismos, Afganistán ha sido el país más mortal para los periodistas en 2018, con un doble atentado suicida el 30 de abril en el que murieron 25 personas, nueve de ellas periodistas y entre los que se encontraba el fotógrafo de la AFP Shah Marai.
El CPJ deplora también, como RSF, el aumento de profesionales de los medios encarcelados (251 en 2018) con un incremento de los ataques a la libertad de prensa como telón de fondo.
Al mencionar el caso Khashoggi, el CPJ lamenta “la ausencia de liderazgo internacional” para defender a los periodistas, y apunta a la administración Trump, que se negó a asumir las conclusiones de la CIA según las cuales el príncipe heredero saudita Mohammed bin Salmán es responsable de ese asesinato. AFP