Contrario a lo que dicta la Constitución en su artículo 231, Nicolás Maduro pretenderá tomar posesión del cargo de presidente de la República este 10 de enero mediante juramento ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y no ante la Asamblea Nacional (AN) como corresponde legalmente.
Gregory Jaimes | LaPatilla.com
La razón que alega Maduro para hacerlo de esta manera es que la AN se encuentra en estado de desacato declarado por el TSJ en enero de 2016. Pero esta figura del “desacato”no está precisada en el artículo 231 de la Constitución. Lo único que detalla es que “si por cualquier motivo sobrevenido el Presidente o Presidenta de la República no pudiese tomar posesión ante la Asamblea Nacional, lo hará ante el Tribunal Supremo de Justicia”.
Esta situación se ha convertido en el epicentro de una controversia inminente para los juristas venezolanos y algunas figuras de la política y dirigentes gubernamentales de nuestro país, quienes han producido variadas interpretaciones al respecto.
Para entrar en contexto, este sábado 5 de enero, la Asamblea Nacional de mayoría opositora, advirtió que Nicolás Maduro estará usurpando la presidencia de Venezuela a partir del 10 de enero, cuando asuma su segundo mandato. El Parlamento opositor además se comprometió, sin dar detalles, a impulsar un “gobierno de transición” que llame a elecciones.
“Reafirmamos la ilegitimidad de Nicolás Maduro (…). A partir del 10 de enero estará usurpando la Presidencia y en consecuencia esta Asamblea Nacional es la única legítima representación del pueblo”, dijo Juan Guaidó, elegido presidente del Parlamento al iniciarse el año legislativo.
Esta firme posición se basa en que Maduro, de 56 años, fue reelegido el elecciones el 20 de mayo de 2018 con más del 50% de abstención según cifras del CNE, cuestionadas por la oposición que afirma que fue de 80%. Unos comicios considerados fraudulentos y anticipados por la Asamblea Constituyente , órgano oficialista de poder absoluto, para perpetuar al gobernante socialista. Los comicios no contaron con la participación de los principales partidos opositores debido a que estaban inhabilitados.
Esta misma posición fue asumida por más de 30 países del mundo junto a la OEA y Unión Europea, que ya han adelantado que no lo reconocerán a partir de este 10 de enero.
Ya los detalles están afinados en la sede del Tribunal Supremo de Justicia para el recibimiento de Maduro, a quien, 31 magistrados de la sala plena, excluyendo a uno que huyó a Estados Unidos, recibirán para apoyar su juramentación como presidente para el periodo 2019-2025.
A continuación le presentamos el perfil de cada uno de los magistrados del TSJ quienes se presume, darán el visto bueno a un Maduro que, tras cinco años de gobierno, pretende volver a gobernar en una Venezuela sumida en una profunda crisis social, económica y política.
– Magistrados de la Sala Constitucional:
Magistrados de la Sala Político-Administrativa:
Magistrados de la Sala Electoral:
Magistrados de la Sala de Casación Civil:
Magistrados de la Sala de Casación Penal:
Magistrados de la Sala de Casación Social:
– Jesús Manuel Jiménez Alfonzo (Sin foto)