Nicolás Maduro, envió este lunes varios mensajes a dos presidentes de latinoamérica para descalificarlos, una característica de él frente a quienes los adversan políticamente.
En medio de su dircurso en la constituyente cubana, Maduro tildó al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, de “Hitler en tiempos modernos”, e ironizó sobre el respaldo de grupos evangélicos al líder ultraderechista.
“Bolsonaro es Hitler en tiempos modernos. Lo es”. En su opinión, Bolsonaro “no tiene coraje y decisión propia, porque es un títere, un pelele, de grupos, sectas (…). Bolsonaro salió de una secta”, dijo Maduro al presentar su informe anual de gestión ante la cosntituyente cubana.
Respecto a su vecino, el presidente de Colombia, Iván Duque, Maduro consideró que se trata de la “personificación del mal”.
Recordemos que el nuevo presidente brasileño llegó al poder con el respaldo de grupos religiosos como la influyente Iglesia Universal del Reino de Dios.
Brasil y Colombia se encuentran entre los países de América Latina que desconocen el nuevo período de Maduro (2019-2025), al apoyar las denuncias de la oposición de que fue producto de elecciones fraudulentas.
Maduro fue reelegido el 20 de mayo de 2018 en comicios en los que los principales partidos opositores de Venezuela fueron inhabilitados. Además los comicios fueron desconocidos igualmente por Estados Unidos y la Unión Europea.
Los gobiernos de Brasil y Colombia no enviaron representantes a la juramentación de Maduro ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), al considerar “ilegítimo” al heredero del fallecido Hugo Chávez (1999-2013).
Según la Constitución, Maduro debía juramentarse ante el Parlamento, de mayoría opositora, pero el TSJ, de línea oficialista, considera nulas todas las decisiones de la cámara tras haberla declarado en desacato en 2016.
La cancillería de Brasil, en un comunicado, dijo reconocer al Legislativo como órgano “democráticamente electo” y aseguró que le corresponde “la autoridad ejecutiva de Venezuela”.
El nuevo presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, dijo tener legitimidad para asumir “un gobierno de transición” que sustituya al de Maduro, pero para ello pidió apoyo ciudadano y de la Fuerza Armada.