Un hombre murió por la mañana, lo que provocó que una jauría de alrededor de 30 perros lo devoraran. Los vecinos de la Venustiano Carranza, en Ciudad de México, llamaron a los servicios de emergencia para atender, publica Infobae.
Pobladores de la colonia 20 de noviembre se percataron de una manada de perros alrededor de una persona. Cuando se dieron cuenta, observaron que se trataba de un hombre que ya no tenía la carne de las pantorrillas y de los brazos.
Según el portal El Gráfico, se cree que la víctima tenía 27 años y cuando lo encontraron los servicios de emergencia tenía al menos 30 perros encima que ya habían ingerido su piel y carne.
Los agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) llegaron al lugar e intentaron asustar a los canes con gritos y lanzando piedras, pero ante tal acción reaccionaron agresivos, ya que no querían alejarse del cuerpo.
De acuerdo con la información del medio, no fue sino hasta que los policías lanzaron balazos al aire que los perros se fueron asustados, abandonando así el cuerpo del occiso. Después de ver que ya no había perros salvajes los oficiales aseguraron la zona y entraron los servicios periciales para llevarse el cuerpo.
En el momento que hicieron en levantamiento, algunos perros se acercaron para ver como se llevaban al hombre, que habían devorado previamente. Según los vecinos que viven en zonas aledañas, decenas de perros los han atacado y también a las personas que cruzan por esa calle.
Entre los que han sido víctimas, habló Fernando García Hernández, “El Pitufo”, quien también vive en situación de calle, declaró que ha sido atacado por los perros varias veces y hasta lo han mordido.
El declarante confesó que esos perros son agresivos, tanto así que muchas de las cicatrices que tiene en el cuerpo son por las mordidas que le han propiciado.
“Son como unos 23 o 24 perros. Los que vienen de aquel lado no tienen dueño. Yo agarro piedras y pelos, botellas y se los voy aventando para espantarlos”, confesó el indigente que ha sido víctima de los perros.
La SSP van a ir a buscar a los caninos para poder llevarlos a la perrera, solo que los vecinos no saben en qué momento van a ir por ellos, ya que muchos de los animales siguen sueltos y vecinos temen por la seguridad de los niños y de las personas sin hogar, ya que son ellos los más propensos a que sean devorados por los perros.
Las autoridades sanitarias han alertado a la población que esterilice a sus perros y no los abandone para evitar la proliferación de perros ferales.