El gobierno venezolano puso en duda la participación de militares en un enfrentamiento con indígenas que dejó al menos dos muertos y 15 heridos cerca de la frontera con Brasil, cerrada desde el jueves por orden del mandatario Nicolás Maduro para evitar el ingreso de ayuda.
“Hay una persona fallecida, es la información que tengo. Dijeron que había sido la Guardia Nacional, ya se está demostrando que no tiene nada que ver la Guardia Nacional”, dijo a periodistas el dirigente oficialista Diosdado Cabello.
Más temprano, el diputado opositor Américo De Grazia denunció que una mujer y un hombre de la etnia pemón murieron en la refriega registrada en el asentamiento Kumarakapay, ubicado en el estado Bolívar (sur), a poco más de una hora de la frontera con Brasil.
La ONG Kapé Kapé indicó que el choque dejó 15 heridos.
Pero según Cabello, quien preside la Asamblea Constituyente que rige a Venezuela con poderes absolutos, los cartuchos hallados en el sitio no corresponderían a militares.
“Es un falso positivo”, afirmó Cabello durante un concierto chavista que hacía contrapeso a otro en Cúcuta organizado para recaudar ayuda.
El dirigente chavista achacó el hecho a “grupos violentos” dirigidos por De Grazia y “gente de Voluntad Popular”, partido del opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente encargado por medio centenar de países.
Dos ambulancias venezolanas cruzaron este viernes la frontera brasileña, cerrada desde la noche anterior, transportando cinco heridos por arma de fuego a un hospital del estado limítrofe de Roraima, al norte de Brasil.