El líder norcoreano, Kim Jong Un, llegó a Vietnam el martes para celebrar una cumbre con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la que buscarán llegar a un acuerdo sobre cómo aplicar el compromiso norcoreano de renunciar a sus armas nucleares.
Está previsto que Trump llegue el martes por la noche a la capital vietnamita, Hanoi.
Ambos líderes se reunirán para una breve conversación privada el miércoles por la noche, seguida de una cena, en la que cada uno estará acompañado por dos invitados e intérpretes, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, a los periodistas en el Air Force One, el avión presidencial.
Trump y Kim se reunirán nuevamente el jueves, señaló.
Sus conversaciones se producen ocho meses después de su histórica cumbre en Singapur, la primera entre un presidente estadounidense en funciones y un líder norcoreano.
Es probable que ambas partes presionen para ir más allá de los vagos compromisos acordados en Singapur para trabajar hacia la completa desnuclearización de la Península de Corea.
Algunas voces críticas en Estados Unidos han advertido a Trump en contra de sellar un acuerdo que haga poco para frenar las ambiciones nucleares de Corea del Norte, y han instado a que Pyongyang tome medidas concretas y verificables para abandonar las armas nucleares que amenazan a Estados Unidos.
A cambio, Kim esperaría concesiones importantes por parte de Washington en materia de sanciones y también con una declaración formal del fin de la Guerra de Corea de 1950-53.
Kim, quien viajó en tren desde la capital norcoreana, llegó a la estación en la localidad vietnamita de Dong Dang después de cruzar la frontera desde China.
Autoridades vietnamitas estaban presentes para recibirlo en la estación con una alfombra roja, guardia de honor y banderas de Corea del Norte y Vietnam. El líder norcoreano viaja acompañado por su hermana, Kim Yo Jong, que se ha convertido en una importante asesora.
Cerca de una docena de guardaespaldas corrieron junto al auto de Kim cuando salió para el viaje de dos horas hasta Hanoi.
Vietnam cerró las carreteras al público y fuerzas de seguridad equipadas con transportes blindados vigilaban la ruta hacia el hotel Meliá en el que se alojará.
Reuters