Se detiene al periodista Luis Carlos Díaz y se le acusa de estar en la desestabilización eléctrica sin ninguna prueba. Tareck El Aissami, quien tiene orden de captura dictada desde los EE.UU está desaparecido. Américo Martí nos asegura que huyó y está en suelo Sirio. La desbandada es general. Hay un contingente de oficiales en la frontera con Colombia esperando órdenes de Guaidó.
Se decretan nuevos días de asueto como si nada. Que no se labore hasta el jueves es desestimar la importancia del trabajo. Con un carnaval adelantado cada día se produce menos.
Las últimas horas han sido duras. Entre las consecuencias del apagón está la incomunicación nacional e internacional. Estuvimos gran parte del tiempo sin teléfono ni internet y además sin agua. En más de tres días de fallas, al menos cinco veces ha vuelto y se ha ido la luz. Las noticias sobre niños y ancianos fallecidos y las carencias hospitalarias nos llenan de dolor. Se nos informa que decenas de personas han expirado desde el pasado jueves debido a la falta de atención médica. Entre los muertos hay sobretodo neonatos, ancianos y pacientes que necesitan de diálisis, y que no pudieron ser atendidos en las emergencias colapsadas y sin insumos. Al momento de escribir este artículo, varios estados como Zulia, Lara y regiones de los Andes y Oriente continúan presentando problemas. En las minas de Baruta, San Martín, la Florida, Santa Cruz del Este, en Maracaibo y Anzoátegui se presentaron saqueos. Mientras tanto otros amigos de lo ajeno hacen de las suyas y la tripulación de Air Europa se pegó un susto. A periodistas como la de El País de España le robaron su cámara. Se acusa también a colectivos, de hacer desmanes.
Es lamentable que el desgobierno no tenga un plan para las contingencias y las situaciones imprevistas. Es la improvisación lo que prevalece.
En los mercados populares reino la preocupación por el estado de los quesos, el pescado, la carne y el pollo, que necesitan refrigeración. La mayoría ni siquiera abrió. El poco efectivo que se tiene y la imposibilidad de conección de los puntos de ventas hicieron inviable los pagos. Ni hablar del caos del transporte y un metro en ruinas.
El desgobierno acusó una vez más al imperialismo de ser el responsable de la debacle y de haber infligido ciberataques reiterados sin presentar evidencias. Afirmar que el país del norte es el único que podría hacer algo así es ridículo. Expertos atribuyen la crisis a falta de mantenimiento y a que se robaron millones de dólares comprando plantas inoperativas. Es absurdo que más del 70% del sistema eléctrico dependa del Gurí.
Tenemos 20 años perdidos en materia de generación eléctrica. La República Civil democrática dejó obras y un superávit de carga eléctrica que ahora han revertido de manera lamentable. Se le fue la luz a un desgobierno sin luces, sin preparación y al borde del precipicio.
@OscarArnal