El oleoducto colombiano Caño Limón-Coveñas fue blanco el miércoles de un nuevo ataque con explosivos, informó la petrolera Ecopetrol que no reportó víctimas fatales ni heridos por el atentado, el undécimo en lo que va del año.
El ataque se registró en zona rural del municipio de Arauquita, en el departamento de Arauca, una próspera región petrolera y ganadera del noreste de Colombia fronteriza con Venezuela.
El bombeo de crudo por la tubería de 773 kilómetros de longitud y con capacidad para transportar hasta 210.000 barriles diarios de crudo estaba suspendido en el momento del ataque, dijo una fuente de Ecopetrol.
La frecuente parálisis del oleoducto no ha afectado las exportaciones ni el bombeo en el campo Caño Limón, ubicado en el departamento de Arauca y operado por Occidental Petroleum, debido a que está utilizando el oleoducto Bicentenario para transportar los 50.000 barriles diarios de crudo producido.
En 2018 el Caño Limón-Coveñas sufrió 89 atentados, según estadísticas de Ecopetrol.
Los ataques son atribuidos por el Gobierno y las Fuerzas Militares a la guerrilla del ELN conformada por unos 2.000 combatientes y considerada como una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea.
El presidente Iván Duque, quien asumió en agosto de 2018 descartó la posibilidad de iniciar una negociación con ese grupo rebelde después de que atacó con un carro bomba en enero una academia policial en Bogotá y mató a 22 cadetes.
El grupo guerrillero, que justifica sus ataques con el argumento de que las empresas multinacionales petroleras y mineras se apoderan de los recursos naturales del país, se niega a suspender unilateralmente sus hostilidades como lo exige Duque para comenzar un diálogo de paz que permita acabar por completo el viejo conflicto que ha dejado 260.000 muertos. Reuters