China admitió haber encontrado “dificultades a la hora de permitir la asistencia de los representantes de Juan Guaidó” a la reunión anual del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En un comunicado de prensa remitido por el Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Pekín justificó su decisión ya que “Guaidó no ha sido elegido presidente a través de procedimientos legales y, por tanto, carece de legitimidad”.
Todo ello, dice China, “a pesar de que el gobernador designado por Guaidó ha superado las votaciones del BID”.
Además, Pekín acusó a “ciertos países” de la cancelación de la reunión anual del organismo, motivada por la denegación del visado a Ricardo Hausmann, el representante de Guaidó ante el BID. “Ciertos países han tratado de imponer sus ideas sobre otros, manipular la cuestión venezolana y forzar la participación de los representantes de Juan Guaidó en la reunión sin tener en cuenta el objetivo del encuentro”, reza el texto de la cancillería china.
En ese sentido, China rechazó cargar con la responsabilidad de la cancelación de la reunión, insistió en que el objetivo del encuentro es la “cooperación amistosa” y mostró su desacuerdo con lo que consideró “politización” del foro.
Hausmann fue designado por el presidente encargado Juan Guaidó como su delegado ante el BID el pasado 4 de marzo y hasta ese entonces había sido director del Centro para el Desarrollo Internacional y profesor de Economía del Desarrollo de Escuela de Gobierno John F. Kennedy de la Universidad de Harvard.
El pasado 15 de marzo, los gobernadores del BID reconocieron a Hausmann como representante de Venezuela ante el organismo, convirtiéndose en la primera institución financiera internacional en dar su aval a un enviado de Guaidó.
Poco gustó esta maniobra en Pekín, que vio cómo los citados “ciertos países” “aceleraron el nombramiento del nuevo gobernador y director ejecutivo por parte de Juan Guaidó en vísperas de la reunión anual e insistieron en su participación en el encuentro”.
Por el momento, el BID canceló este viernes la celebración de su asamblea anual, aunque el organismo se dio un plazo de 30 días para “presentar recomendaciones” sobre una nueva fecha y sede para su reunión anual.
El de Hausmann es el último de una serie de desencuentros entre EEUU -principal accionista del BID, con un 30 %- y China -importante aliado de Caracas-, enzarzados desde hace varios meses en idas y vueltas por las tensiones comerciales.
Falta por ver si la medida de este viernes tendrá consecuencias en la nueva ronda de negociaciones entre China y EEUU, prevista para los próximos días 28 y 29 en Pekín y que tiene por objetivo poner fin a la guerra comercial entre ambos países.
Con información de EFE