Millones de venezolanos pasaron la noche del lunes al martes a oscuras, cuando apenas empezaban a recuperase del masivo apagón que 20 días atrás paralizó al país por una semana.
Una vez más, Caracas y al menos 21 de los 23 estados de Venezuela fueron golpeados por un masivo apagón, reportaron usuarios que utilizaron la etiqueta #SinLuz o #Apagón en las redes sociales.
Desde que el corte energético inició en la tarde del lunes, el servicio se restableció en la capital y regiones centrales por apenas unas horas, pero luego volvió a caer.
Habitantes de otros estados también denunciaron nuevos cortes en las redes sociales, donde expresaron su frustración, furia e ironizaban sobre un nuevo “cyberataque”, como afirma el régimen de Nicolás Maduro.
– “Sabotajes” y “mentiras” –
Los apagones son frecuentes en el país petrolero, y sistemáticamente el ministro de Electricidad, general Luis Motta, los atribuye a sabotajes de la oposición.
El ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, adujo que se trató de “un ataque al centro de carga y transmisión” de la hidroeléctrica de Guri (estado Bolívar, sur), que genera 80% de la energía que consume este país de 30 millones de habitantes.
Pero el líder opositor y jefe del Parlamento Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por más de 50 países tras proclamarse hace dos meses luego de que el legislativo declarara “usurpador” a Maduro, aseguró que el corte se produjo por una “sobrecarga en el sistema de subestaciones”.
“Mienten para no asumir su responsabilidad (…). Están poniendo en riesgo lo poco que queda en pie de la infraestructura eléctrica”, manifestó Guaidó, quien no ha logrado quebrar el principal sostén del heredero del fallecido Hugo Chávez (1999-2013): la Fuerza Armada, con amplio poder político y económico.
“Es rudo, todo deja de funcionar. En los días de apagón uno no hace nada, no hay Internet, no hay acceso al efectivo”, indicó Yendresca Muñoz, analista de banco de 34 años. La única esperanza es “salir de este gobierno”, sostuvo.
El apagón se produjo 18 días después de que un masivo corte paralizara al país durante una semana. El gobierno del presidente Nicolás Maduro atribuyó también esa crisis a “ciberataques” dirigidos por Estados Unidos con respaldo de la oposición venezolana.
– Fuerte impacto –
Los apagones en Venezuela impactan la atención en los hospitales, el suministro de agua y la banca electrónica, vital por la escasez de efectivo que provocan la hiperinflación y la devaluación de la moneda local.
“Esto es ya demasiado (…). Las carnes, los pollos, todo lo que es comida se daña, es pérdida total”, se quejó Leo, de 19 años, empleado de un restaurante del este de Caracas.
A su lado una decena de trabajadores se sentaron en la calle a esperar resignados.
“Ahora debemos caminar toda Caracas porque no hay metro”, se lamentó Alejandra, cajera del restaurante, a AFP. Cientos de personas volvían pie a sus casas al final de la tarde y los pocos buses disponibles estaban atestados.
El masivo apagón de comienzos de marzo afectó con dureza a los hospitales, ya golpeados por la falta de insumos y medicinas. Según oenegés, una decena de pacientes murieron a raíz de los cortes.
Tras esa crisis, Maduro anunció una reestructuración de su gabinete y prometió una “transformación profunda” de las empresas del sector, además de blindar la infraestructura con la Fuerza Armada. Más de una semana después no se producen los cambios ministeriales.
– Tensión EEUU-Rusia –
Guaidó prepara una movilización nacional hacia el palacio presidencial de Miraflores en Caracas para asumir su control, en fecha por definir, y no descarta pedir al Legislativo que autorice una intervención militar extranjera.
Washington, su más ferviente aliado, tampoco excluye una acción militar para sacar a Maduro, a quien se ha propuesto estrangular económicamente con sanciones como un embargo petrolero que se hará efectivo el próximo 28 de abril.
En medio de la presión internacional para que Maduro abandone el poder, Rusia y China, principales acreedores de la deuda externa de Venezuela (estimada en 150.000 millones de dólares), se han convertido en los grandes aliados del presidente socialista.
El pasado sábado dos aviones de las Fuerzas Armadas rusas aterrizaron en el aeropuerto internacional de Maiquetía, que sirve a Caracas, transportando personal militar y equipos, confirmó la agencia estatal rusa Sputnik, desatando un cruce de acusaciones entre Washington y Moscú sobre injerencia en la crisis venezolana.
Con información de Alexander MARTINEZ / Maria LORENTE/AFP