El presidente ruso, Vladimir Putin, quiere “mostrar poder” en Latinoamérica, dice a alnavio.com Maryhen Jiménez, profesora de Ciencia Política e investigadora en la Universidad de Oxford. De ahí que sus militares pululen por Venezuela desde hace dos semanas. De ahí la carta que el Parlamento ruso envió a Colombia este martes. De ahí que todo esto se produzca a escasos días de la reunión de la OTAN en Washington. “A Rusia lo que le interesa es que se le vea. Hacerse notar”, agrega a este diario Alfredo Rodríguez, profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Camilo José Cela.
Por Daniel Gómez
“A Rusia no le interesa un conflicto en Venezuela. Económicamente está muy mal y el país ya quebró siendo la Unión Soviética por meterse en la carrera armamentista. Vladimir Putin no es tonto y aprendió esa lección. Lo que sí le interesa a Putin es molestar, incomodar, ser una avispa para Estados Unidos en la región. Y yo creo que lo está siendo”.
Se lo dice a ALnavío el especialista en política exterior de Europa, Estados Unidos y Oriente Medio Alfredo Rodríguez, profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Camilo José Cela, piloto de helicópteros y teniente coronel del Ejército de Tierra de España.
La presencia de militares rusos en Venezuela es el tema del momento. De hecho, será discutido este jueves en Washington, donde se celebra el 70 aniversario de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Cabe recordar que a este organismo el propio Putin lo definió como enemigo de Rusia en su famoso discurso en la Conferencia de Seguridad de Múnich en 2007.
Lo cierto es que los militares rusos han tenido una importante actividad en Venezuela. Hace dos semanas, dos aviones llegaron al país desde Moscú. No fue un aterrizaje discreto, sino que se detuvieron en la pista principal del país, la del Aeropuerto Simón Bolívar en Maiquetía.
Todo el mundo se enteró, por lo que se especuló sobre una intervención rusa en Venezuela. Reinó la histeria, y el Kremlin, especialista en este tipo de situaciones por sus conflictos en Georgia en 2008 y en Ucrania en 2014, salió al quite diciendo que sus militares brindarían apoyo al régimen de Nicolás Maduro por los supuestos ciberataques que sufrió el sistema eléctrico por parte de EEUU.
Lea el artículo completo en ALnavío