Según la firma de servicios financieros Barclays PLC en el año 2020 Venezuela tendrá un nuevo gobierno y estima un crecimiento de la economía local de 22,8%, publica el diario El Universal.
La compañía escribió su reporte trimestral titulado “The Venezuelan spring” (La primavera venezolana), el cual fue traducido y publicado en la cuenta en Twitter del economista Asdrúbal Oliveros.
El documento señala que el sector petrolero crece 36,1 %; el no petrolero sube 15,2 %; déficit fiscal 11,4 puntos del PIB; inflación cierre 797% y tasa de cambio oficial (cierre) Bs 992.963 por dólar.
El director de Ecoanalítica extrae las ideas más importantes del documento donde destaca que “la situación financiera del régimen, que era insostenible, se está volviendo inmanejable. En el primer trimestre de 2019, sufrió una fuerte pérdida de ingresos petroleros y no puede contar con activos significativos para amortiguar el choque”.
Barclays calcula que la caída de los barriles que generan caja es de 60% muy superior a la caída de la producción de petróleo. También estima que las sanciones y la crisis eléctrica produzcan este año una caída de 700 mil barriles por día en la producción petrolera.
Sobre las próximas semanas: “el suministro de bienes continuará deteriorándose y las tensiones probablemente aumentarán aún más en las próximas semanas.
Debido a la pérdida de ingresos petroleros, esperamos una disminución del 50% en las importaciones a partir de marzo”.
La firma indica que dada las consecuencias de la crisis venezolana en los países de la región, y la situación del crudo iraní, fuerzan a Estados Unidos a presionar todo lo que puedan para lograr una salida a la crisis, antes de que finalice el año 2019.
Sobre los militares a mediano plazo: “la insostenibilidad de la situación podría conducirlos a tomar acciones que hasta ahora no han podido o no han querido tomar”.
En cuanto a una posible intervención apuntó que “la opción militar siempre ha sido el último recurso y la comunicación internacional todavía favorece el uso de herramientas diplomáticas y políticas para encontrar una solución; sin embargo, si se profundiza la crisis, esta alternativa podría ganar apoyo”.
Señala que “no obstante, queda la posibilidad de que este escenario extremo (la intervención) pueda ser evitado, y la oposición probablemente necesitaría agotar todas las opciones disponibles y acumula fuerza antes de hacer tal movimiento”.
Sobre las protestas recientes: “La voluntad de las masas podría comenzar a superar a las fuerzas de seguridad, o un alto riesgo de que esta situación ocurra, podría empujar a la FAN a presionar a Maduro para que se vaya”, dijo.