Estados Unidos insistió el viernes en su oposición a un aumento de la financiación general y de las cuotas de participación del Fondo Monetario Internacional, distanciándose de otros países interesados en elevar los recursos del prestamista global y actualizar su administración.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, dijo que el gobierno del presidente Donald Trump se opone a cualquier cambio por ahora, lo que probablemente signifique que el esfuerzo por aumentar la financiación del FMI y reorganizar los derechos de voto quede en nada durante la reunión de líderes financieros mundiales en Washington esta semana.
Los derechos de voto se modificaron por última vez hace casi una década, permitiendo una mayor influencia de países emergentes como China y Brasil.
“En nuestra opinión, el FMI actualmente cuenta con amplios recursos para lograr su misión y los países también tienen recursos complementarios considerables en caso de una crisis”, dijo Mnuchin en una declaración al comité directivo del FMI que se publicó en el sitio web del fondo el viernes.
Sin el respaldo de Estados Unidos para una actualización de las ponderaciones de los miembros del FMI hay pocas posibilidades de un cambio en las reuniones del fondo y del Banco Mundial de esta semana.
El ministro de finanzas británico, Philip Hammond, temía que la falta de un aumento de fondos pueda obstaculizar la capacidad del FMI para intervenir y ayudar a Venezuela a responder a su agravante crisis humanitaria y económica.
“Estas reuniones son claves para el debate sobre las cuotas y el financiamiento para el FMI”, dijo Hammond.
“Todos anticipamos que a medida que avancen las cosas, en algún momento será necesario un programa importante para apoyar a Venezuela. Por lo tanto, el Reino Unido está muy interesado en garantizar que el FMI en particular esté financiado adecuadamente”, agregó.
Reuters