El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, acusó el sábado al gobierno de Donald Trump de llevar los lazos bilaterales a su peor nivel en décadas, mientras instó a fortalecer la defensa e impulsar la economía, que atraviesa una compleja situación.
Díaz-Canel clausuró una reunión de cuatro días de la Asamblea Nacional, que se enfocó en analizar una economía deteriorada, según afirmó, por las “asfixiantes persecuciones financieras” de Washington, “que hacen particularmente difícil la importación de bienes y recursos de primera necesidad”.
El gobierno de Trump argumenta que Cuba es responsable de la supervivencia de Nicolás Maduro, por lo que está aumentando la presión con nuevas sanciones a la isla caribeña, afectada por un embargo comercial de casi 60 años.
Washington sancionó este mes a embarcaciones y compañías que trasladan petróleo venezolano a Cuba a cambio de servicios de salud y entrenadores deportivos cubanos, una medida que está amenazando la red de energía y el transporte del país.
“La respuesta es: no, señores imperialistas, los cubanos no nos rendimos”, dijo Díaz-Canel en un discurso. Asimismo, agregó que la actual situación significa que “tenemos dos prioridades absolutas: la preparación para la defensa y la batalla económica al mismo tiempo”.
La economía cubana se ha estancado en los últimos años, junto a la crisis de su aliado estratégico Venezuela, lo que ha provocado recortes de combustible y energía. Además, este año ha sido palpable la escasez de harina, pollo y huevos, entre otros artículos.
En un informe presentado más temprano, el ministro de Economía, Alejandro Gil, pidió al país ajustarse el cinturón y que las empresas busquen alternativas a las importaciones, ya que los ingresos en divisas continuaron disminuyendo y el crédito para suministros e inversiones se ha hecho más difícil.
Ante unos 600 diputados, Gil dijo que desde este año se impone “buscar soluciones nacionales para respaldar las ofertas a la población a nivel nacional. Estamos enfrentando un ineficiente cumplimiento del proceso inversionista”.
El gobierno cubano pronosticó este año un incremento de 1,5 por ciento del Producto Interno Bruto desde un 1,2 por ciento del año pasado. “No crecen las exportaciones con la dinámica requerida (…) y estamos previendo que no se va a cumplir el plan de importaciones porque no se concretan los créditos debido a atrasos de pagos de deudas”, señaló. /Reuters