Dos hermanos esrilanqueses musulmanes que figuran entre los kamikazes tuvieron un papel clave en los atentados que dejaron más de 320 muertos el domingo en Sri Lanka, indicaron este martes fuentes cercanas a la investigación.
Los atentados provocaron una masacre en hoteles de lujo e iglesias católicas que celebraban la misa de Pascua, principalmente en Colombo.
Las autoridades atribuyen la matanza al grupo islamista local National Thowheeth Jama’ath (NTJ) y tratan de saber si pudo tener apoyo logístico internacional.
El grupo Estado Islámico reivindicó este martes los atentados.
Un atentado contra un cuarto hotel de lujo de la capital de esta turística isla fracasó, indicaron a la AFP fuentes próximas a la investigación.
Los dos hermanos, de entre 20 y 30 años de edad y cuyos nombres no fueron revelados, eran hijos de un rico comerciante de especias. Según la policía, los dos suicidas operaban una “célula terrorista” familiar y desempeñaban un papel clave en el NTJ.
Los investigadores ignoran todavía si los atentados son obra de esta única “célula” o de equipos separados pero coordinados. No se sabe tampoco si estos hermanos estaban en contacto con los otros kamikazes.
El sábado, los hermanos tomaron cada uno una habitación en los hoteles Cinnamon Grand Hotel y Shangri-La, situados frente al mar en Colombo. Se hicieron estallar cada uno en su hotel a la mañana siguiente durante el desayuno, casi al mismo tiempo.
En la lista de objetivos figuraba también un cuarto hotel, cercano a los atacados, según supo la AFP.
Un hombre que proyectaba cometer un atentado suicida llegó la víspera, pero cuando bajó a desayunar el domingo su mochila llena de explosivos no detonó por una razón todavía desconocida.
“Cuando se produjo la explosión del Shangri-La este hombre abandonó precipitadamente su hotel (…) Su pista condujo a un motel justo al exterior de Colombo”, contó un alto mando policial que pidió anonimato porque no está autorizado a expresarse públicamente.
Rodeado por las fuerzas del orden al principio de la tarde en la periferia sur de Dehiwala, el sospechoso se hizo estallar y mató a dos transeúntes. AFP