Uno, James Hunt, era un playboy quien afirmaba “desayunar con sexo”. El inglés no sabía de horarios ni de respetar reglas. El otro, Niki Lauda, un meticuloso y obsesivo. El austriaco era un estructurado al máximo. Personalidades antagónicas, pero con nobles valores a la hora de pelear arriba de un auto de carrera. La rivalidad que ambos tuvieron por el campeonato en 1976 es una de las más recordadas en la Fórmula 1, publica Infobae.
En 2017, en una entrevista concedida al periodista estadounidense Graham Bensinger, Lauda recordó con mucha emoción a Hunt. “Conocía a James de la Fórmula 3 europea. Estábamos siguiendo más o menos el mismo camino para intentar llegar a la F-1. Nuestra relación era muy buena. Cuando me ganó el campeonato por un punto, le dije que ‘estaba contento de que el campeón fuera él y no otro'”, reveló.
Hunt se retiró tras el GP de Mónaco de 1979, tres años después de ser campeón. Al poco tiempo atravesó por un difícil momento y Lauda contó que le dio una mano: “Se puso en una situación personal terrible. Bebía mucho y perdió todo su dinero, porque invirtieron su fortuna en unas empresas cuyas acciones perdieron valor”, confesó el austríaco. Y continuó: “James acabó sin dinero y completamente arruinado. Lo llamé y le dije que iba ir a Londres, que nos podíamos ver. Vino en una bicicleta con los neumáticos pinchados. Parecía estar acabado. Pelo largo, ropa sucia… Le dije: ‘¿Estás loco o qué?’ ‘¿Qué querés decir?’, me dijo. ‘Mírate en el espejo. James, vas a matarte si seguís así’. ‘No tengo dinero’. ‘¿Cuánto necesitas? Te doy 300 libras, pero hacé algo. Te apoyo, pero tenés que volver'”.
“Luego, James estuvo mejor. Estaba completamente limpio y trabajó para la BBC comentando las carreras. Todos estábamos contentos de que él volviera a estar con nosotros”, agregó.
Sobre el momento de la prematura muerte de Hunt, a los 45 años por un ataque al corazón en 1993, Lauda quedó golpeado por su pérdida: “Tenía una personalidad fantástica. Era divertido. Era un hombre al que nunca podías olvidar, cuando lo conocías. James es una de esas pocas personas de las que digo que aún están vivas, a pesar de que hace muchos años que han muerto. Cuando podés decir algo así de alguien, es que era formidable. Hay gente que pasa al olvido, pero nunca olvidaré a las personas que han sido especiales en mi vida. James fue una gran parte de eso; todavía está vivo para mí”.
Este lunes, Niki Lauda murió a los 70 años. Fue tres veces campeón de la Fórmula 1 y uno de los mejores pilotos de la máxima competencia del automovilismo mundial: ganó 25 carreras y se consagró en 1975, 1977 y 1984. Y supo reponerse con un temple inigualable a un terrible accidente en 1976.