Moschino creó desconcertantes bikinis de papel, Dolores Cortés propuso sobre la pasarela trajes de baño al estilo armadura, y Beach Bunny apostó una temporada por incorporar bolsillos en la braga del bañador. Reinventarse o morir podría ser el lema de estas firmas, amantes del riesgo. Y cuando crees que ya todo está inventado, aterriza en las playas una insólita tendencia que rompe cualquier esquema, pero triunfa.
Por: Infobae
Los bikinis hechos con trozos de cinta adhesiva irrumpieron en la industria de la moda, y su éxito ha sido rotundo. Su creador, Joel Alvarez, conocido como “The King of Tape” (El Rey de la Cinta), produce los diseños desde el año 2008, pero no fue hasta 2019 que sus extravagantes bikinis se colaron en Coachella o en el festival Ultra de Miami.
Influencers, artistas y asistentes acapararon miradas en las explanadas de estos eventos al vestir los bikinis del Rey de la Cinta. Finos trozos de cinta de colores metálicos se adhieren a las partes más íntimas del cuerpo, formando sinuosos dibujos, que se cuidan al milímetro y dejan lo justo a la imaginación.
Este éxito reciente de Joel Álvarez le llevó a abrir su primera tienda en Miami, “The Black Tape Project“, donde ha ampliado las gamas de colores y propuestas.
“Aunque este proyecto de arte comenzó exclusivamente con cinta negra, ahora he comenzado a experimentar con diferentes técnicas y nuevas formas de cintas adhesivas”, explicó el diseñador en el sitio web de su tienda.
El precio de cada rollo de cinta varía en función del color y la cantidad. Los hay desde USD 24.99 hasta USD 49.99. En la web te introducen en el arte del “body tape art”, que consiste en cubrir las zonas más íntimas con cinta, y te enseñan a modelar tus propios diseños, a combinar las formas y colores y añadirle incluso tachuelas.
Se espera que la próxima parada de la tendencia sea en el festival Zoo Project, en Ibiza, España. Famosos e influencers asistirán al evento de una de las islas más atrevidas y enérgicas del mundo, y seguro que no fallarán los asistentes que se aventuren a vivir el festival sin ropa, cubiertos únicamente por pequeños trozos de cinta adhesiva.