Los restos mortales del futbolista José Antonio Reyes, fallecido el sábado en un accidente de tráfico, serán incinerados este lunes después de la misa de córpore insepulto que se ha oficiado en la iglesia de Santa María de la Mesa de Utrera (Sevilla), su localidad natal, que ha despedido al jugador en un entierro multitudinario.
El cadáver de Reyes fue velado toda la noche en el Ayuntamiento utrerano, del que salió a las nueve de la mañana de este lunes hacia el templo cubierto con una bandera del Sevilla -el club en el que se formó y en cuyo primer equipo militó ocho temporadas divididas en dos etapas- y una enseña nacional.
Miles de paisanos contemplaron el paso de la comitiva fúnebre y prorrumpieron en una cerrada ovación al paso del futbolista, 21 veces internacional absoluto y que jugó en varios de los clubes más importantes de Europa, en lo que constituyó el último adiós del pueblo a uno de sus hijos más célebres.
Todas las banderas ondeaban a media asta en señal de duelo en Utrera, cuyo alcalde decretó dos días de luto oficial, y donde numerosos vecinos desfilaron ante la familia de Reyes para mostrarle sus condolencias.
El portavoz de la familia del fallecido, Antonio Fermín Díaz, ha enviado a diversos medios un escrito en el que traslada el “sincero agradecimiento a todas aquellas personas, entidades, instituciones, equipos de todo el mundo y especialmente a la Casa Real” por las muestras de cariño al conocerse el fallecimiento del jugador.
El comunicado muestra “gratitud igualmente” a quienes “acompañan en el duelo” a los parientes de Reyes, “así como a los que por medio de distintas redes sociales enviaron mensajes de consuelo”, con mención especial al “Sevilla Fútbol Club y al Excelentísimo Ayuntamiento de Utrera”.
José Antonio Reyes falleció el sábado por la mañana cuando el coche en el que circulaba junto a dos familiares, uno de los cuales ha muerto también y el otro se encuentra herido de gravedad, por la autovía A-376.
Fuentes de la investigación han informado a EFE de que el “exceso de velocidad” es la primera causa que se baraja para explicar la salida de la vía del vehículo de gran cilindrada en el que viajaba Reyes, que se incendió tras dar varias vueltas de campana.