Guarequena Gutiérrez, la embajadora en Chile designada por el Presidente (E), Juan Guaidó, pidió este viernes que se “flexibilicen” los requisitos de entrada al país debido a que muchos venezolanos que escapan de su tierra no tienen acceso al pasaporte.
Gutiérrez aseguró que “hay una crisis con los pasaportes” y con el acceso a los “documentos de identidad del país” y por eso pidió que se aceptara la vigencia de los papeles “emitidos antes del 2013”, en un acto en Santiago para celebrar los 208 años de la independencia del país caribeño.
“Desde nuestra representación diplomática no podemos decir a otra nación qué es lo que debe o no hacer. Pero tenemos que visibilizar que los venezolanos no tenemos acceso a un pasaporte”, afirmó Gutiérrez tras realizar un minuto de silencio por “todas las víctimas de la dictadura de Nicolás Maduro”.
La representante diplomática también aseguró que “un promedio de 5.000 venezolanos abandonan diariamente la patria, sus casas, la vida construida en el país que les vio nacer” debido a “un régimen autoritario que ha contribuido durante 20 años a llevar a Venezuela al caos y la miseria que hoy vemos”.
A finales de junio la frontera chilena con Perú y Bolivia vivió unos días de caos al congregarse unas 400 personas que no disponían de los documentos necesarios para entrar en el país, después de que el Gobierno chileno estableciera la exigencia de contar con una “visa consular” para los venezolanos que quieran visitar el país.
Las autoridades han señalado que dicho documento forma parte de su política migratoria, que busca “ordenar la casa” en esa materia, después de que cientos de miles de extranjeros llegaran como turistas y se quedaran a vivir.
Centenares de venezolanos estuvieron durante días en ambas fronteras a la espera de que las autoridades chilenas aprobaran su ingreso, que finalmente los destinaron a Perú y Bolivia para que facilitaran sus trámites migratorios.
El llamado “visado consular de turismo”, exigido por Chile a los ciudadanos venezolanos desde el pasado 22 de junio, permite ingresar al país con fines recreacionales por un periodo máximo de 90 días y no permite realizar actividades remuneradas.
Hasta ese momento, los ciudadanos venezolanos sólo contaban con la exigencia de tener la denominada “visa de responsabilidad democrática”, en el caso de que quisieran radicarse en Chile, que se expedía por un año, prorrogable por el mismo período.
Gutiérrez también solicitó que se facilite la “reunificación familiar” de los menores que se encuentran en Venezuela y que no cuentan con los documentos en regla para unirse con sus progenitores que “vinieron a Chile a trabajar”.
Chile es el tercer principal país de acogida de venezolanos, con 288.200, que se han convertido en la mayor comunidad de inmigrantes del país, con el 23 % de todos los extranjeros.
Por otro lado, la representante de Guaidó celebró las conclusiones del informe de la Organización de las Naciones Unidas, realizado por la expresidenta de Chile y ahora alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.
“Con este informe ya no solo es nuestra palabra sino que es la alta comisionada quien está dando fe de lo que vio en Venezuela y de lo que viene tiempo recogiendo allí”, dijo.
En este informe se habla “de la escasez de alimentos y de medicamentos que además cuando se consiguen son extremadamente caros para un salario que no alcanza los 7 dólares mensuales, que no son ni cinco días de comida para un venezolano”, sostuvo Gutiérrez.
Asimismo, calificó de “inconmensurable” el valor del informe como prueba ante la Corte Penal Internacional de cara a una futura investigación.
Autoridades y otros diplomáticos acompañaron a Gaurequena Gutiérrez en el acto que se realizó ante la estatua de Simón Bolívar, el fundador de Venezuela el 5 de julio de hace 208 años.
“La distancia es amplia entre lo que se vivió en 1811 y lo que vivimos hoy en la región. Pero la crisis de Venezuela supone un nuevo desafío para el continente y así consolidar una nueva independencia de la tiranía”, concluyó Gutiérrez.
EFE