Todos los pronósticos apuntaban que el informe que Michelle Bachelet presentaría este 5 de julio ante el Consejo de la ONU no sería nada blando contra el régimen de Maduro después que la Alta Comisionada escuchó los testimonios más dolorosos de los familiares de las víctimas y presos políticos, civiles y militares que por el simple hecho de disentir, fueron objeto de persecución, de amedrentamientos, hostigamientos, encarcelamientos y asesinatos, caso Albán y recién el C/F Acosta. Analistas no dudan en asegurar que será el inicio del camino para una supervisión más exhaustiva por parte de las Naciones Unidas, lo que a su vez significará el ejercicio de una mayor presión hacia el régimen usurpador.
El diputado Rafael Veloz sobre el Informe de Bachelet indicó que la visita de la funcionaria que en criterio de muchos fue corta, pero intensa por la apretada agenda que permitió las entrevistas con todas las personas e instituciones que tenían denuncias importantes, arrojó que el informe de julio fuese mucho más duro que el de marzo, resaltando sin matices, sin maquillaje, las violaciones en todos los sectores, especialmente los DDHH a que han sido expuestos los ciudadanos en Venezuela. “Las críticas contra la señora Bachelet según mi análisis fueron propiciadas por el régimen para desestimar la importancia de su visita y crear un ambiente de incertidumbre. Se equivocó una vez más el régimen usurpador. De nada valió que le impusieran un “acompañante”, que trajeran una funcionaria venezolana amiga de Bachelet. Se impuso la verdad cruel, dura, de los padecimientos de millones de ciudadanos que anhela, claman el retorno de la democracia y todas las bondades que la caracterizan. En relación a las violaciones de los derechos civiles y políticos el Informe de julio señala que “durante al menos de una década, el gobierno, así como las instituciones controladas por el gobierno han aplicado leyes y políticas que han acelerado la erosión del Estado de Derecho y el desmantelamiento de las instituciones democráticas, incluyendo la Asamblea Nacional”. ¿Cuántas veces los diputados del único poder legitimado por el voto de los ciudadanos hemos denunciado las violaciones reiteradas al sistema judicial, que en estos momentos es servil al régimen? Alertamos permanentemente que el camino escogido por el régimen atenta contra la paz, la seguridad, el bienestar de los ciudadanos, sin embargo, en vez de disminuir la presión se incrementó aún más desde el 2016. Es tan contundente el contenido del Informe que hoy y lo recibimos con beneplácito, la jueza María Lourdes Afiuni como se lo prometió Bachelet recibió la libertad plena después de vivir el horror producto de haber sido detenida en 2009 siguiendo órdenes desde Miraflores por liberar al empresario Eligio Cedeño. Se encontraba bajo arresto domiciliario desde 2011. Durante nueve años y siete meses conoció sin intermediarios el dolor, la desesperación y la injusticia. Y otra noticia que nos complace es la liberación del colega Braulio Jatar, detenido en 2016 por la policía tras informar sobre las manifestaciones en contra de Maduro en su medio de comunicación Reporte Confidencial. Posteriormente fue trasladado a diversas cárceles hasta que en 2017 se dictó arresto domiciliario y debió permanecer privado de libertad en su casa en el estado Nueva Esparta”.
El Informe de julio en materia de justicia señala que el régimen ha reconocido que existe un problema de acceso a la justicia para todas las personas y ha pedido a la ACNUDH que le ayude a resolver esta cuestión. De ser cierto que proceda en consecuencia. En el país hay organismos entre ellos ONGs calificadas, de trayectoria consolidada que puedan cooperar sobre el tema. Hay una realidad que atender de inmediato en el país y es el contenido de este Informe tan contundente sobre la gravísima crisis venezolana, entre ella, lo referente a las 7.000 presuntas ejecuciones extrajudiciales que se produjeron en Venezuela en el último año y medio. ¿Quedaran impunes estas ejecuciones? Los culpables ¿están detenidos, sancionados?
El parlamentario está de acuerdo con los analistas que a partir de ahora será de más presión para el régimen por parte de la comunidad internacional y por supuesto, de los ciudadanos. “Tenemos que seguir en la calle, no podemos desviarnos de la hoja de ruta. Todos tenemos la responsabilidad del cambio en nuestras manos, no esperemos que otros vengan hacer lo que nos corresponde. Calle y más calle y confianza en lo que el presidente (e) Guaidó está haciendo.
Nota de prensa