A juicio del embajador del presidente Juan Guaidó ante Canadá, Orlando Viera Blanco, la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya será determinante en la solución de la crisis humanitaria, política, económica y social que atraviesa Venezuela.
El embajador Viera Blanco quien participa en una misión diplomática, jurídica y técnica que estudia impulsar y reforzar las denuncias que durante años se han formulado ante esta elevada instancia a los fines de lograr el enjuiciamiento de Nicolás Maduro y su cadena de mando, dijo que existen claras y contundentes pruebas de la violación de derechos humanos en nuestro país.
“Existen evidencias claras, públicas y notorias, sobre la comisión de delitos contra la humanidad en Venezuela. El mundo ha sido testigo de primera fila de represión, muertes, persecución política, aparheid y torturas causadas por el régimen de Caracas, y castigadas por el Estatuto de Roma. La CPI no escapa de ser una entidad de Justicia Goibal, que está en la impostergable obligación de conocer y penalizar estas atrocidades. Ha llegado la hora que se haga justicia porque la impunidad nos está conduciendo a la barbarie como modo de vida”, advirtió.
En este orden de ideas manifestó que la Corte Penal Internacional dispone de todas las herramientas jurídicas y cohercitivas para enjuiciar a dictadores incursos en crímenes de lesa humanidad, forzar su comparecencia en juicio y la de su cadena de mando, además de instar la cooperación de los Estados Miembros en los procesos de recaudación y reguardo probatorio, rotatorias y/o captura forzosa.
Dijo que Walter Márquez ha denunciado el retardo perjudicial de la Fiscalía a cargo y ya es noticia se han designado cuatro Jueces de Cuestiones Previas para evaluar ese reclamo conforme a los artículos 26, 41 y 43 des Estatuto. “A ello hay que darle seguimiento y vigilancia. En la Justicia penal trasnacional podría está la llave que abra las puertas de la libertad y La Paz en Venezuela. Vamos por ella”, sentenció el embajador Viera Blanco.
Nota de prensa