El martes, durante el partido entre Vila Nova y Sport Recife por la Serie B del fútbol brasileño, ocurrió una de las lesiones más impactantes de la temporada, cuando uno de los futbolistas se dislocó el codo derecho en una mala caída.
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Sobre el final del segundo tiempo, el delantero Bruno Mezenga fue a presionar al rival que llevaba la pelota y en su afán por recuperar el esférico cayó al suelo, con tanta mala fortuna que no pudo bien el brazo de apoyo.
Cuando su mano hizo contacto con el césped, su codo se dobló hacia afuera, dejando una impactante imagen para las cámaras de televisión. El delantero se retiró en ambulancia aún no se hizo público el parte médico.
Por desgracia para el Vila Nova, el equipo perdió 2 a 0 y para el momento de la lesión de Mazenga, el entrenador ya había realizado los tres cambios por lo que terminó jugando el partido con 10 futbolistas.
Marcelo Cabo, director técnico, del cuadro que resultó perdedor, dijo en conferencia de prensa que, sin la necesidad de tener los resultados médicos, sabía que no podría contar con el futbolista en los próximos compromisos.