Andrés Parra, el actor que interpretó al ex presidente Hugo Chávez (“El comandante”) y Pablo Escobar (“El Patrón del Mal”), y ahora es uno de los protagonistas de “La odisea de los giles”, la película de Sebastián Borensztein, contó su perspectiva de la situación política que se vive en Venezuela.
Por Infobae
En entrevista con Tatiana Schapiro y Horacio Marmurek, del programa Modo Sábado, que se transmite por Radio Nacional AM 870, Parra reveló que “como actor no hay mayor representación de la miseria humana que la de un político”.
“El Comandante” generó el enojo del régimen de Nicolás Maduro, incluso señaló que tenía la intención de “desfigurar” a su líder, porque “la transnacional de Estados Unidos” sabía el impacto que tiene en el siglo XXI, incluso dijo que buscaría hacer su propia versión del ex presidente.
Sin embargo para el actor que consideró el papel de Chávez como “el reto más importante de su carrera”, dijo que estudió su personalidad por año y medio, el personaje que más le ha costado, ya que en contraste con Pablo Escobar, que lo estudió por tan sólo tres meses.
Consideró que el poder corrompe, precisamente como el eslogan de la serie: “Si Chávez no hubiera tenido la debilidad de dejarse corromper por el poder yo creo que hubiera sido un extraordinario líder”.
“Me pasó que comenzando la investigación me empecé a meter mucho con el mundo de la política, perdí la ingenuidad política. Es un tema que me interesa mucho, la farsa que es la política. Como actor no hay mayor representación de la miseria humana que la de un político. Me interesa la mezquindad humana del que se dedica a la política, el nivel de putrefacción que llega a tener un ser humano cuando la política lo carcome”.
De igual forma consideró que el humano es complejo por naturaleza y tiene contrastes, por lo que considera que el bien y el mal en el alma se puede revertir de un momento a otro, y a veces, no hay retorno.
“Yo he querido irme por la línea de mostrarle al público el ser humano, conecté con su humor, las habilidades comunicativas. Tiene una personalidad completamente arrolladora, si no hubiera tenido la debilidad de dejarse corromper por el poder yo creo que hubiera sido un extraordinario líder pero no tuvo la fuerza para eso. La prosa de Chávez, su capacidad comunicativa, tenía una personalidad arrolladora, es un fenómeno que no se va a volver a repetir en Latinoamérica. Sobreponerse al poder requiere de un carácter especial y Chávez no lo tuvo y se llevó al país”.
Sobre la crisis en Venezuela opinó que: “es terrible, es muy doloroso salir a la calle, estamos llenos de familias que han tenido que dejar su país a la fuerza. Este no es un país rico ni preparado, no alcanza para nosotros”.
“Hay una fobia a los pobres y creo que lo que más le pasa a los venezolanos. al pobre es al que no quieren y es al que le cierran las puertas. Salís a la calle y es mucha gente pidiendo ayuda. Salís a las carreteras y encontrás filas de venezolanos dándose cuenta que aquí no lo lograron”.
Su futuro paso por Argentina
El actor consideró que trabaja por el amor a cada proyecto y no por la propuesta económica y adelantó que se está “cocinando algo” para el año entrante de comedia en Argentina.
“Hice una cosita muy chiquita en ‘Casados con Hijos’ de Colombia. Fui invitado a un capítulo. Se está cocinando algo para el año entrante de comedia en Argentina. Debo decir que su comedia tiene un nivel de inteligencia que me encanta mucho” y refirió que podría ser que sea para mediados y final del año entrante.
“Tengo un solo problema con Argentina y es que engordo mucho. Tenganme preparadas milanesa, pizza, helado, vino, cerveza y los libros de Cortázar”, bromeó el actor.