En lo que va de este 2019, cifras que maneja la Cámara de Fabricantes Venezolanos de Productos Automotores (Favenpa) dan cuenta de solo 321 vehículos ensamblados en el sector privado del país. Dicho número implica una reducción de 99,6%, comparado con hace 10 años.
Por Deisy Martínez / 2001.com.ve
El presidente del gremio Omar Bautista, advirtió que la producción vino arrancando en el cuarto mes del año, por lo que hasta marzo no se había armado ni un carrito.
“No se han tomado medidas especiales que mejoren las condiciones del sector por lo tanto la situación será la misma para lo que resta de año y en franco deterioro. La principal razón del bajo nivel de actividad productiva es la caída del mercado, entendiéndose por caída la hiperinflación que ha ocasionado altos costos en los productos junto con la pérdida del poder adquisitivo de los venezolanos”, expresó Bautista.
Caída libre. En 1998 se ensamblaron en territorio nacional 127.571 vehículos y casi una década después la cifra repuntó a 172 mil unidades. Para la época, de acuerdo con Favenpa el suministrar partes de automotores para el ensamblaje representaba el 50% de la venta de los autopartes, porcentaje que cayó dramáticamente en la actualidad a 1%.
En 2017 se armaron en el sector privado 1.774 carros y en 2018 unos 1.155.
La poca existencia de vehículos de paquetes en algunos concesionarios caraqueños cofirman la poca producción. Al ToyoCentro de la marca Toyota, ubicado en Quinta Crespo llegaron tan solo 4 carros en el mes de agosto para ser vendidos , de los cuales hasta jueves 12 de septiembre quedaba uno. La empresa Multimarca con sucursales en La Paz y Las Mercedes en Caracas cuenta con un mayor inventario de carros nuevos de marcas Ford y Kía. “Vendemos vehículos nuevos y usados. La demanda depende del mes pero sí hay movimiento (venta) de unos y otros, hay personas que todavía tienen cierto poder adquisitivo y compran”, expresó una vendedora que prefirió omitir su nombre.
A Expomarca de la avenida Páez del Paraíso también llegan unos porcos automotores Ford de paquete que se ofertan junto a los usados que predominan en cantidad. Una empleada reveló que las ventas bajaron mucho pero siempre llega alguien que compra pese a la situación.
“En el país existen alrededor de 300 concesionarios y hay baja oferta de automotores al público, estamos hablando de una caída de 99,6% de la producción nacional. Hay concesionarios que solo atienden la parte de repuestos o trabajan solo con vehículos usados”, apuntó Bautista.
Las empresas mixtas como la SDK, creada mediante convencio entre el Gobierno nacional y el capital privado de Venequip y Navistar en 2013, apenas ensambló 412 unidades en 2017, el número subió a 1.106 en 2018, mientras que la planta Chery armó 1.200 unidades hasta agosto de 2019.
Si bien la producción impulsada desde el Ejecutivo es un poco mayor que el sector privado está muy lejos de los 210.000 automóviles que aseguró Nicolás Maduro en marzo que podían ensamblarse en Venezuela.
En marzo de este año, el Ejecutivo aprobó 200 millones de euros para la creación del Fondo Especial Rotatorio para el Plan Nacional de Compra de Vehículos, acompañado, de acuerdo con Maduro, con “el otorgamiento de incentivos fiscales, la reestructuración total de las empresas públicas de partes y autopartes, así como la incorporación de la producción nacional en todas las industrias automotrices” que trabajan en el país.
La importación. Favenpa advirtió que mientras persistan las causas que mantienen de capa caída al sector automotriz la producción no despegará.
“Por ejemplo, las importaciones de vehículos duplican el ensamblaje, es decir, se han traído de afuera 635 en lo que va de año, contra 321 carros armados en el país”, reprochó el vocero.
Desde el 29 de abril de 2019, el Ministerio de Industria y Producción Nacional mediante Gaceta Oficial Extraordinaria número 6.454 autorizó la importación de automóviles usados hasta con cinco años de antiguedad. Al respecto, Bautista señaló que hasta ahora no han podido medir el impacto de esta medida que en su momento rechazaron porque entre otras cosas, envejecería aun más el parque automotor criollo.
“Otra causa de la caída son las importaciones de repuestos sin impuestos. Desde el año pasado el Ejecutivo Nacional publicó un decreto mediante el cual incluyó alrededor de 6 mil productos exonerados del pago de impuesto de importación, pago del IVA (Impuesto al Valor Agregado) y la tasa aduanera lo que implicó una competencia desleal con productos nacionales.
En el caso de las autopartes en concreto están los pistones de aluminio fabricados en el país con mucho esfuerzo, las baterías, los cauchos que han experimentado una caída importante en la producción nacional, se ven desplazados por la proliferación de productos importados por las facilidades que hay para traerlos”, añadió Bautista.
El mercado criollo también se ve afectado por la falta de materias primas nacionales e importadas. El sector automotor es alto consumidor de acero, entre otros insumos, que fabricaba la empresa básica Sidor y esta se encuentra paralizada. La falta de divisas igualmente impide que se traiga materia prima foránea.
“Está la falta de financiamiento de la banca, la medida de encaje legal que pesa sobre el sector bancario está ocasionando que tanto los públicos como los privados no otorguen créditos para capital de trabajo a las industrias y ello afecta considerablemente, dado que las empresas acuden a créditos financieros para la compra de la materia prima y eso está totalmente cerrado”, aseguró el vocero.