El martes comienza el debate de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (UNGA, por sus siglas en inglés) en Nueva York, el evento que congrega a decenas de líderes, diplomáticos y miembros de la sociedad civil de todo el mundo.
La pobreza, la educación y la inclusión son los tres temas que el Embajador de Nigeria ante el organismo, quien preside la 74ta Asamblea General de la ONU, eligió como prioritarios. Sin embargo, el panorama político también marcará el pulso de uno de los encuentros diplomáticos más grandes del año.
¿Cuáles serán los temas que más destacarán en la UNGA?
Venezuela
La ONU servirá como escenario para retratar la lucha de poder en el país suramericano. A pesar de que la ONU no reconoce a Juan Guaidó como el presidente encargado de Venezuela, una delegación del gobierno interino estará presente durante al menos dos días de la Asamblea General.
Aún no se sabe si el propio Guaidó viajará a Nueva York, ya que está en la lista de participantes de un evento paralelo a la UNGA. Su enviado en Estados Unidos, Carlos Vecchio, dijo el lunes pasado que el presidente interino está “considerando” asistir a la Asamblea General.
Por su parte, el presidente en disputa Nicolás Maduro dijo que se quedará en Venezuela y que, en su lugar, la vicepresidenta Delcy Rodríguez y el canciller Jorge Arreaza lo representarán frente a la comunidad internacional.
Los países que reconocen a Guaidó han demostrado ya que aprovecharán la asamblea para presionar por la salida de Maduro del poder. El presidente de EE.UU., Donald Trump, se reunirá el miércoles con presidentes del continente para hablar sobre la crisis en el país.
Por su parte, los cancilleres de los países que integran el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) se encontrarán para invocar el pacto de defensa ante la situación en la nación de la OPEP.
Adicionalmente, el presidente de Colombia, Iván Duque, ha dicho que va a denunciar al gobierno en disputa ante la ONU por estar “protegiendo y patrocinando” a grupos guerrilleros colombianos, como el ELN y las disidencias de las FARC, en su territorio.
Irán
La cumbre de la ONU llega en un momento en el que las relaciones entre Estados Unidos e Irán han llegado a su punto más álgido en los últimos meses, después de que el país norteamericano culpara a la república islámica de estar detrás del ataque a la mayor refinería petrolera del mundo en Arabia Saudí.
Aunque tanto Trump como Arabia Saudí culpan a Irán por el bombardeo con drones, el grupo yemení Houthi, que lleva más de cuatro años en guerra con los saudíes, se atribuyó el ataque.
A pesar de las fuertes sanciones, que llegaron en parte como represalia al bombardeo, EE.UU. dio luz verde a la entrada del presidente de Irán, Hassan Rouhani y al primer ministro al país para poder asistir a la UNGA.
Aunque la posibilidad de un encuentro entre Rouhani y Trump se diluyera esta semana, con ambos líderes expresándose en contra de un diálogo, el secretario general de la ONU, António Guterres, sugirió que el Consejo de Seguridad del organismo tuviera un papel importante en reducir las tensiones después del ataque.
Expertos de la ONU, que monitorean e informan al Consejo de Seguridad sobre la implementación de las sanciones de la ONU contra Irán y Yemen, viajaron a Riad, junto con Guterres advirtieron el miércoles que una confrontación importante en el Golfo tendría “consecuencias devastadoras” para la región y el mundo.
Cambio climático
Las acciones para pedir a los líderes mundiales que tomen acciones más agresivas contra el cambio climático comenzaron con pie fuerte el viernes: millones de personas a nivel mundial se unieron a las marchas, convocadas por los jóvenes, conocidas como la “huelga del clima”.
En Nueva York, miles de personas llenaron las calles en una protesta a la que asistió Greta Thunberg, la activista adolescente por el medioambiente que se ha convertido en la cara del movimiento global.
El lunes, un día antes de que inicie el debate general, el secretario general presidirá una Cumbre para la Acción Climática, en la que Guterres espera presionar para que los países cumplan con las promesas del acuerdo de París del 2015, del cual EE.UU. se retiró en el 2017.
El discurso del presidente brasileño Jair Bolsonaro también será relevante respecto al tema medioambiental debido a los devastadores incendios que han quemado el Amazonas en las últimas semanas.
El gobierno de Bolsonaro ha solicitado a la ONU incluir en su delegación a dos funcionarios del gobierno interino venezolano de Juan Guaidó, para que participen oficialmente en la Asamblea General.