Las fuerzas del orden detuvieron a seis personas durante las protestas callejeras independentistas de las últimas horas en Cataluña, según informó la Policía catalana este lunes.
Esa región autónoma española vivió el domingo una nueva jornada de movilizaciones contra la sentencia del Tribunal Supremo que condenó a nueve líderes soberanistas a penas de prisión por el proceso independentista ilegal de 2017.
Los agentes detuvieron el domingo a tres personas en Barcelona, dos en Lérida y una en Gerona, aunque por primera vez desde que comenzaron las protestas, hace una semana, no hubo enfrentamientos entre manifestantes y Policía.
La pasada semana, Cataluña, y especialmente Barcelona, fueron escenario de altercados y disturbios graves, con el resultado de unos 600 heridos, entre ellos un policía muy grave y cuatro manifestantes que perdieron un ojo; 28 encarcelados provisionalmente y daños superiores a los 2,5 millones de euros (2,75 millones de dólares).
La violencia y el vandalismo ha acrecentado la tensión entre el Gobierno español y las autoridades soberanistas catalanas.
El Ejecutivo español ha instado repetidamente al presidente catalán, Quim Torra, a que apoye a las fuerzas de seguridad y se posicione contra la violencia sin ambigüedades ni equidistancias.
El jefe del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, se desplaza este lunes a Barcelona para visitar a los agentes heridos en los disturbios y reunirse con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de Estado, según informan fuentes gubernamentales.
Sánchez envió hoy una carta a Torra para recordarle su obligación de condenar la violencia y “evitar la discordia civil”.
Según el gobernante español, son obligaciones de todo responsable público “condenar la violencia de forma rotunda; amparar a las fuerzas de seguridad que la combaten; y evitar la discordia civil”.
Sánchez responde así a las llamadas de los últimos días y una carta de Torra, que le había emplazado a dialogar sobre el futuro político de Cataluña la autodeterminación. EFE