El ministro de Industria, Tareck El Aissami. El ministro de Finanzas, Simón Zerpa. El superintendente de criptomonedas, Joselit Ramírez. El propio hijo de Nicolás Maduro, Nicolasito Maduro Moros. Según reveló a Konzapata el exjefe del Sebin Christopher Figuera, estos son algunos de los hombres que están detrás de los negocios asociados al petro, la criptomoneda que inventó el chavismo.
El petro es la criptomoneda que Maduro ha tratado imponer en Venezuela desde diciembre de 2017. Primero como criptoactivo, luego como unidad de cuenta, y ahora como una especia de puente de intercambio para conseguir otras divisas como el yuan, el euro y la rupia. Monedas intercambiables y con algún valor, no como el devaluado bolívar. La más reciente iniciativa también busca controlar y manipular los ahorros de más de tres millones de venezolanos que trabajan en la administración pública.
Pero según Cristopher Figuera todo esto es mentira. Y lo es porque el petro fue la excusa para importar de China miles de mineros, que es el nombre que reciben los ordenadores que crean criptomonedas como el bitcoin y el éter.
“El petro no se mina. Pero con ese engaño se importaron miles de aparatos llamados miners (mineros)”, explica el general.
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