La Casa Blanca condenó el domingo a Irán por el uso de la “fuerza letal” contra manifestaciones en protesta por la subida del precio de la gasolina que dejan dos personas muertas y decenas de detenidos.
“Estados Unidos apoya al pueblo iraní en sus protestas pacíficas contra el régimen que debe dirigirlo”, dijo en un comunicado la portavoz del Ejecutivo, Stephanie Grisham.
“Condenamos el uso de la fuerza y las restricciones de las comunicaciones contra los manifestantes”, agregó, denunciando los excesos de un régimen que “abandonó a su pueblo”.
Desde el comienzo de la protesta, decenas de personas han sido arrestadas, según informes de la prensa iraní.
Apoyando la decisión del gobierno de su país, el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, condenó el domingo los actos de violencia de los manifestantes.
Según la agencia oficial de noticias Irna, un oficial de policía murió a raíz de sus heridas en la noche del sábado al domingo tras enfrentamientos con “alborotadores” armados al margen de un mitin en Kermanshah (oeste).
Un civil fue asesinado en Sirjan (sur), donde los manifestantes intentaron incendiar depósitos de gasolina.
La ira popular fue provocada por el fuerte aumento en los precios de la gasolina anunciado por el gobierno el viernes.
La retirada unilateral de Estados Unidos en 2018 del acuerdo nuclear internacional alcanzado entre las cinco grandes potencias con Irán en 2015, y el restablecimiento de las fuertes sanciones estadounidenses han sumido a la economía de la república islámica en una recesión violenta.
AFP