El clima invernal cedió momentáneamente en buena parte de Estados Unidos, justo a tiempo para el Día de Acción de Gracias, después de que el viento, la nieve y el hielo provocaron trastornos en el tráfico y antes de las grandes tormentas pronosticadas para el viernes.
Hubo algunas excepciones, como en la principal autopista norte-sur de California, que fue cerrada el jueves por la madrugada después de una nevada intensa.
Sin embargo, los vientos fuertes -que arrancaron un cartel de la Torre Willis en Chicago el miércoles- amainaron lo suficiente el jueves para permitir la realización del desfile de Acción de Gracias en Nueva York, con todo y sus globos gigantes.
El servicio meteorológico pronosticó que los viajeros tendrán dificultades el viernes en el regreso a casa. Se pronostican nevadas intensas y vientos fuertes en buena parte del oeste del país, los que podrían cruzar las Rocosas y provocar tormentas el sábado.