Tampoco es casualidad que, como ha denunciado ABC, se hayan detectado diferentes reuniones en Caracas de representantes de grupos subversivos de esos y otros países donde se están produciendo movimentos violentos de protesta. En realidad, desde sus primeros orígenes, el chavismo bolivariano tenía ambiciones de expandir su propagación ideológica a todo el continente y a España. Dado que ya no es posible por la vía electoral -hasta en Bolivia su acólito Evo Morales no puede ganar ni con trampas-, la táctica ha evolucionado hasta llegar al fomento de la insurrección destructiva, aprovechando el eco de las redes sociales y la intoxicación informativa. El chavismo carga ya con una pesada responsabilidad por haber llevado a la ruina más absoluta a Venezuela, a ello debe sumarse esta actividad conspirativa que está causando daños graves a otros países.
Publicado originalmente en el diario ABC (España) el 27 de noviembre de 2019