El número de fallecidos por el terremoto de magnitud 6,4 en la escala de Richter que sacudió el martes Albania ha ascendido a los 50, mientras se han puesto fin oficialmente a las operaciones de rescate en todas las zonas afectadas, según informó este sábado el primer ministro, Edi Rama.
“Las operaciones de búsqueda y rescate han concluido y desgraciadamente debo decir que el número de las víctimas ha llegado a las 50”, declaró Rama en la reunión gubernamental de hoy.
El jefe del Ejecutivo no pudo contener las lágrimas al mencionar a las familias de las víctimas, a las que prometió una ayuda especial por parte del Estado.
Rama ha prometido también reconstruir todas las viviendas dañadas por el seísmo durante el próximo año. Según el ministerio de Defensa más de 4.000 personas aún están fuera de sus casas, porque sus hogares han quedado inhabitables o por miedo a volver a sus casas ante posibles nuevas réplicas.
Unas 2.470 personas se han trasladado de las carpas provisionales a hoteles, informó el primer ministro.
FAMILIAS DESTROZADAS
La catástrofe ha acabado con diez familias al completo. El caso más numeroso fue el de una familia de nueve personas, ocho de las cuales murieron tras desplomarse su vivienda de cuatro plantas en los suburbios de Durres. Los miembros más jóvenes de la familia eran unos gemelos de dos años de edad.
Entre los fallecidos hay dos hermanos de 32 y 29 años de Kosovo, cuyos cuerpos fueron encontrados sin vida en un hotel derrumbado también en Durres.
Esta ciudad costera del mar Adriático ha sido la más golpeada por el seísmo que ha causado un millar de heridos.
Según señaló Rama, aún hay hospitalizadas 41 personas, mientras que tres pacientes graves fueron enviados a Italia para recibir asistencia médica más especializada.
Unos 9.000 niños están traumatizados y necesitan apoyo psicológico, según la organización internacional Save the Children.
El primer ministro agradeció sus esfuerzos a los equipos de rescate albaneses y extranjeros que lograron salvar a 45 personas tras sacarlas de entre los escombros.
AYUDA INTERNACIONAL
En las operaciones de rescate participaron especialistas de emergencias provenientes de Italia, Grecia, Rumanía, Kosovo, Francia, Suiza, Serbia, Macedonia del Norte y Montenegro.
Pese a la solidaridad de muchos albaneses, especialmente empresarios que han donado millones de euros, Rama ha abogado por la organización de una conferencia internacional de donadores para ayudar a las víctimas y facilitar la reconstrucción de Durres y Thumana.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha anunciado que construirá 500 unidades familiares para los afectados.
El terremoto derrumbó también una parte del muro bizantino del castillo de Durres y dañó la fortaleza de Kruja y Preza, monumentos culturales, donde está prohibido el acceso de visitantes.
Expertos albaneses relacionan la gravedad de los daños con el mal uso y el abuso de los permisos y materiales de construcción de edificios así como la corrupción endémica de los empleados públicos en los últimos 30 años, desde la caída del comunismo.
EFE