Vasily y Lyudmila Ignatenko vivían en Prípiat, un pueblo cerca de la planta de energía nuclear en lo que entonces era la Unión Soviética y hoy es Ucrania, cuando el cuarto reactor de Chernobyl explotó, lanzando niveles letales de radiación por el aire. Vasily, un bombero, fue llamado a combatir el fuego de la explosión, un acto de valor que le costaría la vida. Los altos niveles de radiación que recibió al acercarse tanto al destruido reactor le provocó radiotoxemia en tan solo unos minutos.
Por Infobae
Al cabo de una hora tuvo que ser trasladado al hospital, con terroríficas quemaduras por todo su cuerpo, para luego ser trasladado a Moscú para ser tratado. Su esposa, embarazada de su primer hijo, lo acompañó a su lado en sus últimos momentos en el hospital, donde falleció tan solo unos días después del accidente.
Esta trágica historia es una de las principales tramas que narra la exitosa serie de HBO, “Chernobyl.” Usando la perspectiva de la pareja, la serie ofrece una mirada humana del accidente, mostrando su vida juntos como una joven pareja, el momento del accidente y Vasily combatiendo el letal fuego, y sus últimos momentos juntos, ella a su lado mientras que él lenta y dolorosamente se moría de irradiación aguda.
El show incluso muestra el momento en la que una técnica nuclear descubre a Lyudmilla, embarazada, al lado de su moribundo marido, y la aparta, advirtiéndole que la radiación podría matar a su bebé-algo que cruelmente se convertiría en la realidad meses después. La historia de la pareja es capaz la más triste de una serie que muestra un accidente donde murieron cientos y miles enfermaron de cáncer por los efectos de la radiación.
Pero la verdadera Lyudmila, de 58 años, dice la serie resultó ser un problema para ella. En declaraciones a la BBC, la sobreviviente del accidente dijo que había sufrido abusos por parte de los televidentes indignados de que se hubiera quedado en el hospital con su bebé nonato, que vivió solo cuatro horas después de haber nacido. Apuntando a HBO, también reveló que había sido ‘perseguida’ desde que se emitió la serie y afirmó que no había sido consultada, aunque HBO lo niega.
A pesar de que Lyudmila elogió la “atención al detalle” de la serie de HBO, dijo que esta la dejó “lastimada e inquieta”. Después de que el show -en la que fue interpretada por la actriz irlandesa Jessie Buckley- salió al aire, tuvo problemas con gente que ni siquiera conocía. “Había personas acosándome en mi departamento, diciéndome cosas feas porque había estado tan cerca de mi esposo mientras estaba embarazada. Pero, ¿cómo podría dejarlo? Pensé que mi bebé estaba a salvo dentro de mí. Entonces no sabíamos nada sobre la radiación” se justificó.
Además, dijo que ella no le había dado permiso a HBO o Sky para aparecer en la serie. Pero sí dice que recibió una llamada de Moscú después de que la serie ya había sido filmada, ofreciéndole tres mil dólares por haber aparecido en el programa. Sin embargo, no creía que la llamada fuera genuina y no creía que le ofrecieran nada. Y el contexto de la guerra entre Rusia y Ucrania alimentó su dudas. “Por supuesto que pensé que era un fraude.” Pero más que nada, dice que le “dolió mucho” que ni siquiera la llamaran para consultarle sobre los detalles de la historia.
Sin embargo, HBO dice que no es cierto que no le consultaron. De hecho, según el Daily Mail, el estudio de producción estadounidense le dijo a la BBC que ellos hablaron con Lyudmila “antes, durante y después” de filmar la serie y que tuvieron varias conversaciones con ella sobre cómo contar su historia. HBO afirma que le ofrecieron una “oportunidad para participar en el proceso de narración de cuentos y proporcionar comentarios”, y además, ella nunca indicó que no estaba contenta con su versión de los hechos.
Por su parte, Lyudmila dice que solo ha visto algunas partes del show en la televisión ucraniana pero no vio toda la serie. Ella nunca se volvió a casar pero sí tuvo otro hijo, quien hoy tiene 20 años. Se mudó a Kiev años después de la muerte de su marido y vive con su hijo.
La serie de HBO ganó 10 Emmys y con 9,6/10, la serie de televisión mejor calificada de todos los tiempos en el sitio web de IMDb, también ha provocado un aumento en el número de visitantes a la planta y al ahora pueblo fantasma de Prípiat.