La diputada ante la Asamblea Nacional (AN), Delsa Solórzano rechazó este martes la prohibición de la visita de la Comisión de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) a Venezuela, que arribaría al país desde el 4 hasta el 8 del mes en curso.
Nota de prensa
La parlamentaria, aclaró que desde el año 2002, la mencionada comisión ha solicitado en varias oportunidades el ingreso a la nación, con la intención de contactar la crisis de violación de derechos humanos; así como sostener reuniones con los denominados presos políticos y familiares.
La legisladora señaló que a los miembros de la CIDH se les prohibío abordar el avión en Panamá, que los trasladaría a Venezuela, esto tras la orden del Presidente “usurpador”, Nicolás Maduro, “desde hace varios años tristemente Venezuela ha sido declarado un país foragido en relación a violación de derechos humanos”, aseveró.
Además dijo que, Venezuela se encuentra actualmente incluido en el libro cuarto de la comisión de la organización internacional, como unos de los países que frecuentemente ha violado los derechos humanos de los ciudadanos, “estamos junto a Cuba y Nicaragua, ambos régimenes de corte autoritarios y comunistas”, resaltó.
Agregó, que en el país hoy día están privados de libertad injustamente más de 400 ciudadanos, solo por pesar distinto al Gobierno, sumando a esto la grave situación en el sector salud por la falta de medicamentos, insumos y pésimas infraestructuras.
Solórzano indicó que, los integrantes de la comisión recibirán a las víctimas en la frontera colombo-venezolana, esto a consecuencia de que el régimen de Maduro les negara el visado correspondiente, con el único propósito de evitar la verificación de la grave situación en materia de violación de derechos humanos en el país.
Cabe destacar, que la diputada ofreció dichas declaraciones a los distintos medios de comunicación desde el Teatro Vidal González del Complejo Deportivo, Recreativo y Cultural Los Salias, ubicado en San Antonio de los Altos, estado Miranda, donde se llevó a cabo la sesión solemne de la AN, tras el impedimento de la entrada de los legisladores de la bancada opositora al Palacio Federal Legislativo por encontrarse tomado arbitrariamente por ilegítima junta directiva de Luis Parra.