Rafael Suárez Gómez, de 32 años, transitaba por una calle en los Cayos de la Florida, con el gran martillo en la mano cuando golpeó ventanas y automóviles que se encontraba en su camino.
Por: Miami Mundo
Cuando la Policía llegó al lugar el hombre había desaparecido. Un vecino aseguró haberlo visto tirarse a un canal.
Minutos después, el hombre caminaba por una calle aledaña, aún con la mandarria en la mano, donde fue ordenado por el cuerpo de seguridad prescindir de ella y tirarse al suelo.
Suárez obedeció la orden y al tirarse al suelo se envolvió en posición fetal. Hizo resistencia cuando los agentes intentaron esposarlo y tras el uso de Taser lograrlo someterlo para ser detenido.
Más tarde, el hombre declaró que había tomado y que recordaba haber ingerido algún tipo de narcótico que alguien le dio.
Y fue entonces, según su declaración, que vio “demonios” y que los “demonios” le ordenaron causar daños a ventanas y automóviles.
No hay informe de daños personales. Tampoco se ha dicho si el sujeto será analizado por un equipo de psicólogos o siquiatras pero se sobreentiende, dada la naturaleza de los hechos, que será evaluado por especialistas.
Gómez fue finalmente detenido y afronta ahora varias acusaciones por causar daños materiales y resistirse el arresto.