El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este viernes que su país se ha sumado al pacto de la OPEP+ para reducir la producción de petróleo pero con una disminución de solo 100.000 barriles diarios y tras pactar también con Estados Unidos, que en compensación bajará un poco más su producción.
“Estados Unidos se compromete a reducir adicionalmente a lo que él iba a entregar. Son 250.000 (barriles diarios), dice el presidente (Donald) Trump que es por México, para compensar”, apuntó el mandatario mexicano desde el Palacio Nacional.
Este jueves, la OPEP, Rusia y otros productores de crudo alcanzaron un acuerdo básico para reducir su oferta petrolera en un 23 % ante la crisis en el sector causada por la pandemia del COVID-19.
No obstante, según fuentes cercanas a la negociación, la entrada en vigor del pacto había quedado condicionada a la participación de México, e incluso su ministra de Energía, Rocío Nahle, había abandonado la reunión telemática.
El presidente mexicano quitó este viernes importancia a la supuesta tensión que sus negociadores causaron en la reunión.
“México va a contribuir a estabilizar los precios que se desplomaron en los últimos días”, afirmó el líder del izquierdista Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Explicó que la mezcla mexicana de 40 dólares por barril llegó a 11 dólares “en el peor momento” de la guerra de precios entre Rusia y Arabia Saudita.
“Cuando tuvimos la conversación, cuando se llevó a cabo una conferencia con la presencia de los jefes de Estado del grupo G20 yo hablé de ese tema, de que había que actuar con responsabilidad porque a partir de ese desacuerdo se cayeron las bolsas y se depreciaron las monedas”, explicó López Obrador.
Sobre la reunión de la OPEP+, indicó que México se mantuvo “hasta el final” en su plan de no reducir su producción de petróleo a gran escala.
“Nos ha costado mucho esfuerzo aumentar la producción, ya aquí hemos hablado de cómo durante 14 años consecutivos dejaron caer la producción de petróleo en el país. Fue un rotundo fracaso la política petrolera que aplicaron”, indicó, en referencia a gobiernos anteriores y a la caída durante años de la producción.
Destacó que, desde que asumió el poder el 1 de diciembre de 2018, su Ejecutivo se ha esforzado para aumentar la producción y la eficiencia de Petróleos Mexicanos (Pemex), logrando parar la tendencia a la baja.
“Esto se argumentó ayer de que para nosotros era muy difícil el hacer una reducción en la producción”, subrayó.
Por ello, según sus palabras, no se pudo disminuir la producción hasta el 23 % – del orden en México de 400.000 barriles diarios – y se negoció para que solo quedara en 100.000 barriles diarios para el país.
“Nos sostuvimos, salieron notas en los periódicos queriéndonos culpar que por nosotros no habría el acuerdo. Hablamos, se comunicó con nosotros el presidente Trump, hablé con él y se llegó a un acuerdo de hacer una disminución de 100.000 barriles”, cerca de un 5 %, subrayó López Obrador.
Además, su principal socio comercial, Estados Unidos, se comprometió a reducir “adicionalmente” unos 250.000 barriles diarios para “compensar”.
López Obrador indicó que su decisión se notificó “tarde”, pero “de inmediato”. “Ya es forma, ya cumplimos con este asunto”, remarcó el presidente, dando por zanjado el asunto y esperando que la decisión de la OPEP+ ayude a estabilizar los mercados.
De esta manera, y según informó este jueves la ministra de Energía de México, la producción del país pasará de 1,781 millones de barriles diarios en marzo de 2020 hasta 1,681 millones de barriles. EFE