Una caravana de autobuses inició el traslado de venezolanos a distintos estados del país, que regresaron desde Colombia, Ecuador y Perú, en medio de la pandemia de coronavirus y tras cumplir una cuarentena en la frontera con territorio colombiano.
Nicolás Maduro ha dicho que espera recibir más de 15.000 venezolanos de países vecinos.
Venezuela, en cuarentena desde hace más de un mes, contabiliza 227 casos de COVID-19, tras 23 nuevos infectados, y hasta la fecha nueve fallecidos, dijo la noche del viernes el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez. La mayoría de los últimos casos son del insular estado Nueva Esparta.
Rodríguez responsabilizó del repunte de casos al gobernador de la isla, Alfredo Díaz, pero la autoridad local acusó al gobierno de Maduro de permitir el ingreso a la isla de dos personas contagiadas desde República Dominicana, pese a que los vuelos fueron cerrados desde mediados de marzo.
Las autoridades han asegurado que más de 3.000 venezolanos ya han retornado, mientras grupos de derechos humanos y opositores han denunciado las precarias condiciones de los improvisados albergues, sin agua, sin camas o comida, en los que son recluidos los venezolanos al cruzar los límites con Colombia, a diferencia de otros países donde las cuarentenas se cumplen bajo otras condiciones.
Una villa deportiva en el estado central de Carabobo recibió casi a la medianoche del viernes a 330 venezolanos que regresaron desde los países andinos y fueron evaluados de nuevo para descartar síntomas del COVID-19, dijeron las autoridades de ese estado. Luego fueron enviados a sus hogares.
“Bienvenidas carabobeñas y carabobeños a su casa a su tierra. Más nunca tendremos q tolerar la xenofobia vivida en los países a los q les tocó ir”, escribió en Twitter el gobernador de Carabobo, Rafael Lacava.
Mientras que en el estado Aragua, vecino a Carabobo, también llegaron 163 repatriados la noche del viernes.
Naciones Unidas calcula que casi 5 millones de venezolanos han salido del país en los últimos años huyendo de la grave crisis económica y social que aqueja a la nación OPEP.
Muchos de los venezolanos que regresan estaban de forma irregular y sin documentos en esas naciones vecinas, donde sobrevivían de trabajos temporales o como vendedores ambulantes, opción que quedó cerrada en cuanto se implantaron cuarentenas para evitar la propagación del coronavirus.
La epidemióloga regional de Carabobo, María Auxiliadora Rangel, confirmó a Reuters que en la denominada Villa Olímpica, que se inauguró para los Juegos Sudamericanos en 1994, mantiene un equipo de médicos y enfermeras las 24 horas del día para atender a por lo menos 400 personas. Si alguien da positivo se le aislará por al menos 14 días, dijo.
Desterrados por los efectos del coronavirus, cientos de emigrantes venezolanos comenzaron a caminar la semana pasada de regreso a su país desde Colombia, que se convirtió en los últimos años en el domicilio de más de 1,8 millones de nacionales del país OPEP. Reuters