La policía y grupos de jóvenes se enfrentaron por segunda noche consecutiva el domingo en un suburbio de París habitado predominantemente por ciudadanos con bajos ingresos, en un momento en que las estrictas normas de confinamiento para contener la propagación del coronavirus amenazan una frágil paz social en las zonas más desfavorecidas de la ciudad.
Los disturbios en Villeneuve-La-Garenne estallaron por primera vez a última hora del sábado, después de que un motociclista resultara herido al chocar con la puerta abierta de un coche de policía camuflado.
La calma se restableció en la madrugada del domingo, pero posteriormente volvió a estallar el conflicto. Se dispararon fuegos artificiales contra los agentes de policía y se incendiaron contenedores, según informaron los canales de televisión BFM TV y C News TV. La policía respondió con gas lacrimógeno.
Las autoridades dijeron que se han enviado mediadores al barrio para tratar de relajar la situación y se ha abierto una investigación policial interna.
La policía dijo el domingo que pretendía detener al motociclista tras haberlo identificado conduciendo a toda velocidad en sentido contrario sin casco.
Reuters