Un porcentaje menor de personas que se hacen la prueba en COVID-19 en Florida dan positivo.
Ese es uno de los factores importantes que indicarán cuándo está bien reabrir partes de la economía del sur de la Florida.
Cuando eso suceda, será un esfuerzo regional.
Los líderes locales han dicho que seguirán el ejemplo del gobernador Ron DeSantis.
Hace aproximadamente cinco semanas, se implementaron el distanciamiento social y los cierres. Los modelos de la época predijeron que el virus se propagaría rápidamente por todo el estado. También hubo preocupaciones de que las instalaciones de atención médica se desbordarían. Así que nos quedamos en casa para aplanar la curva.
DeSantis dijo que lo hicimos y tal vez las modelos y los medios se equivocaron.
“De hecho, hubo un artículo en marzo en el Miami Herald que decía que esta semana de abril podríamos ver a 465,000 personas hospitalizadas en todo el estado de Florida. La realidad es un poco más de 2.000. Esas predicciones han sido falsas, nuestro trabajo está teniendo éxito, hemos allanado la curva ”, dijo el martes.
El gobernador también rechazó semanas de titulares de miedo que advierten que el coronavirus golpearía a Florida con fuerza.
“No seguimos el camino de Italia. No seguimos el camino de la ciudad de Nueva York. De hecho, lo hicimos mucho mejor que cualquiera de esos lugares ”, dijo DeSantis.
El martes, la Fuerza de Tarea de Reapertura de Florida celebró una conferencia telefónica. Están buscando cómo poner en marcha el turismo, los restaurantes y los hoteles.
“Es importante que consigamos profesionales médicos en el equipo de trabajo y sigamos su ejemplo en estas cosas”, dijo el representante estatal Shervin Jones.
Jones señaló que el grupo de trabajo tiene un solo profesional médico, un CEO del hospital. Le preocupa que el estado se esté moviendo demasiado rápido y pueda terminar peor.
“La verdad es que podría abrir una copia de seguridad de las empresas, pero si abro las empresas de nuevo y no se presenta nadie porque están asustadas o enfermas, no tiene sentido. Podríamos hacerlo bien la primera vez para no tener que retroceder”, dijo.
La mayoría está de acuerdo en que se necesitan pruebas rápidas para volver a abrir, algo que Florida ha aumentado significativamente, pero aún le falta mucho.
“Probablemente vamos a tener más sitios de prueba en la próxima fase que en esta fase porque no sabemos qué va a pasar, qué va a aparecer o qué”, dijo DeSantis.
El martes, el director de los Centros para el Control de Enfermedades dijo al Washington Post que no solo se espera una segunda ola, sino que “existe la posibilidad de que el ataque del virus a nuestra nación el próximo invierno sea aún más difícil que el que acabamos de pasó por.”
Mientras tanto, DeSantis está tratando de tranquilizar a Florida de que lo peor puede estar detrás de nosotros.
“Vamos a estar bien. No estamos fuera del bosque. Esto es algo con lo que tendremos que lidiar ”, dijo.
Se espera que el grupo de trabajo de reapertura haga sus recomendaciones al gobernador el viernes.
El pedido más seguro en el hogar, a partir de ahora, termina la próxima semana. DeSantis se negó a decir qué planea hacer, pero sí indicó que los datos tienden a lo que se necesita para poder volver a abrir.