Por ahora, no parece que las pruebas universales lleguen a los centros de atención a largo plazo de Florida. Eso a pesar de una fuerte recomendación del presidente Donald Trump el lunes.
Trump, hablando con un grupo de reporteros fuera de la Casa Blanca, instó a los gobernadores de la nación a evaluar a los residentes y al personal, pero no lo exigió.
“Creo que todos los estados deberían hacerlo”, dijo Trump. “Si tienen la capacidad de hacer hogares de ancianos, deberían serlo. Esa es una vulnerabilidad real “.
Sin embargo, Florida aún no ha anunciado un plan para hacerlo. En cambio, durante una conferencia telefónica el martes, los funcionarios de salud estatales dijeron a los hogares de ancianos y centros de vida asistida que esperaran una forma en que una instalación solicite formalmente al estado que evalúe a sus residentes y al personal.
“Debido a la mayor demanda de pruebas y pasar a una fase de sostenibilidad, vamos a configurar un buzón y registro”, dijo el jefe de la Oficina del Departamento de Salud de Florida, Shay Chapman. “Eso llegará pronto”.
Se suma a las protecciones actuales, incluidas las visitas prohibidas y las estrictas medidas de detección para el personal.
Florida también ha creado equipos de ataque de virus itinerantes, que están probando en instalaciones sospechosas de tener un brote. La Agencia de Florida para la Administración de Atención Médica emitió el domingo reglas de emergencia que requieren que el personal de atención a largo plazo se someta a esas pruebas estatales si así se solicita.
“Sabemos que el virus COVID-19 altamente contagioso puede manifestarse como asintomático en individuos positivos, lo que aumenta la vulnerabilidad y la oportunidad de transmisión en las interacciones necesarias entre el residente y el cuidador que son esenciales en los entornos de atención a largo plazo”, dijo Helen Ferre, comunicaciones. director del gobernador Ron DeSantis en un comunicado. “El gobernador DeSantis ha estado ampliando los esfuerzos para realizar pruebas en hogares de ancianos y centros de salud a largo plazo”.
Hasta la semana pasada, las pruebas solo se habían realizado en aproximadamente 90 de los 3,800 lugares de atención a largo plazo del estado.
A los operadores les preocupa que eso no sea suficiente. Durante semanas han estado pidiendo más a medida que el número de muertos aumenta en sus instalaciones. Los residentes y el personal de hogares de ancianos y de vida asistida ahora representan más del 40 por ciento de todas las muertes de COVID-19 en Florida.
“Las pruebas son muy importantes porque realmente ayudan a nuestros centros de atención a tomar decisiones clínicas importantes sobre la atención de los residentes, y les ayuda a tomar decisiones de personal”, dijo Kristen Knapp, directora de comunicaciones de la Florida Health Care Association.
Knapp dijo que sin más apoyo estatal, los miembros de HCA probablemente continuarían confiando en pruebas privadas para mantener seguros a los residentes y al personal. No es algo que todos puedan pagar, dijo.
Las solicitudes de números de prueba actualizados del Departamento de Salud de Florida no fueron respondidas de inmediato.