La reina Isabel II fue trasladada el 15 de marzo al castillo de Windsor junto a su esposo el duque de Edimburgo para mantenerse resguardados durante la cuarentena y así también evitar ser contagiados por letal virus que ya se ha cobrado la vida de miles de personas en todo el mundo.
Las apariciones de la monarca han sido puntales, como para el discurso televisivo que ofreció para celebrar el 75 aniversario de la victoria de los aliados en la II Guerra Mundial. De modo que todos los eventos a los que la realiza estaba acostumbrados, han sido totalmente suspendido. Algunos de ellos son: Las carreras de Ascot, celebración del Trooping the Colour para festejar su cumpleaños y sus vacaciones en Balmoral.
Si pensabas que la monarca británica se encuentra solamente junto a su marido, los perros raza corgis y su selecto personal de asistentes, estas totalmente equivocado, pues su alteza real también está acompañada también de otros seres que no son de este mundo.
Con información de Vanitatis
Por si no lo sabías, el castillo de Windsor es conocido por ser una de las propiedades de la Corona británica con más fantasmas: 25 espíritus deambulan por las enormes instalaciones de la propiedad. De hecho, si hacemos números, en el castillo hay más difuntos que vivos porque junto a la reina y el duque se encuentra un equipo formado por 22 personas. Así que Vivientes 24 – Espectros 25: ganan por uno.
Encantado y visitado
El de Windsor está considerado como el castillo ocupado más grande y más antiguo del mundo y suele atraer a más de un millón de visitantes cada año. Gracias a la venta de entradas factura más de 23 millones de euros. Algo que ahora se ha quedado en 0, por razones obvias. Parte de esos turistas llegan atraídos por la espectral leyenda que le rodea, que la propia reina ha ayudado a hacer crecer. Isabel, junto a su hermana Margarita, afirma haber visto el fantasma de Isabel I, conocida como la Reina Virgen y que reinó en el siglo XVI.
Visit Britain (Oficina de Turismo británica) afirma que la figura fantasmal de Isabel I “a menudo se ve en la biblioteca” y “sus pasos se pueden escuchar en la madera desnuda del suelo, antes de que aparezca su presencia llamativa”. Otro espíritu que se pasea por las estancias es el de Jorge III, que reinó a finales del siglo XVIII.
Supuestamente se le ha visto “mirando con nostalgia fuera de la habitación debajo de la biblioteca, donde estuvo confinado durante sus periodos de locura”. En la lista también habría que incluir a Enrique III, a quien se ha escuchado “cojear” en los claustros del decanato y hasta en ocasiones se puede oír el “sonido de su pierna ulcerada golpeando el suelo mientras camina”.
Un fantasma en el jardín
Uno de los espíritus que más gente asegura haber visto es el de Herne el Cazador cabalgando por los jardines del castillo. Según la leyenda, Herne perdió el favor del rey y decidió ahorcarse en un roble que todavía permanece. La leyenda cuenta, además, que siempre que se aparece lo hace cabalgando un gran caballo negro y con la compañía de perros fantasma.
La reina Isabel debe de ser un poco como los gallegos, que no creen en meigas pero ‘haberlas, haylas’. Por eso, en el año 2000 autorizó a un equipo de científicos liderados por el profesor Richard Wiseman, de la Universidad de Hertfordshire, para que investigara el espíritu de Catalina Howard, la quinta esposa de Enrique VIII, que se afirma que deambula por los corredores del palacio de Hampton Court, 18 kilómetros al oeste de Londres. La mujer fue decapitada a los 20 años, acusada de un adulterio y desde entonces deambula por las estancias reales.