Más de 1,8 millones de personas solicitaron la semana pasada el subsidio convencional por desempleo en Estados Unidos, con lo que ya suman más de 42 millones los trámites desde que a finales de marzo la pandemia de COVID-19 empezó a golpear el mercado laboral estadounidense.
Según el informe del Departamento de Trabajo, el promedio de solicitudes en cuatro semanas, que compensa la volatilidad del dato semanal y es más indicativo de la tendencia, fue de 2,28 millones, comparado con la media de 2,6 millones de la semana anterior.
Las solicitudes, que alcanzaron una cima de más de 6,8 millones en la última semana de marzo, han ido disminuyendo en semanas recientes a medida que ha progresado la reapertura de muchas actividades económicas.
Hasta mediados de marzo y durante varios meses el promedio de solicitudes de esta prestación rondaba los 200.000 trámites semanales.
Pero en la semana que concluyó el 23 de mayo había 21,48 millones de personas que ya percibían esa prestación social, frente a los 21 millones en la semana anterior, un indicio de que sigue creciendo la cifra de quienes ya reciben los pagos.
La mayoría de los estados tuvo una disminución en el número de solicitudes desde la semana previa, y en California hubo un incremento de alrededor de 618.000 nuevos trámites, principalmente debido a ajustes bisemanales en las reglas para las solicitudes.
Asimismo, en la semana que terminó el 30 de marzo hubo 623.073 pedidos de la prestación por desempleo al amparo de la Asistencia de Desempleo por Pandemia, un programa federal que amplió los beneficios de manera temporal a otras personas, como los trabajadores independientes, que no pueden acceder al subsidio convencional.
En la semana que terminó el 16 de mayo había 10,7 millones de personas que recibían la prestación por desempleo bajo este programa temporario.
En marzo el Congreso aprobó y el presidente Donald Trump promulgó un conjunto de medidas por 2,3 billones de dólares para hacer frente a la emergencia causada por la pandemia de COVID-19. El programa incluyó diversas formas de asistencia a los trabajadores despedidos, las empresas y sus costos de sueldos, y los estados.
Este viernes el Departamento de Trabajo dará a conocer el índice oficial de desempleo, que estuvo en 14,7 % en abril, y la mayoría de los analistas calcula que ha llegado al 19,8 % en mayo.
Los datos oficiales reflejan un cambio en los efectos de la pandemia sobre el mercado laboral: los despidos continúan y han empezado a afectar más a los trabajadores mejor pagados y los supervisores, que habían eludido la primera oleada de despidos.
Y esto ocurre cuando otros trabajadores empiezan a retornar a sus empleos con el aflojamiento de las normas de confinamiento con variantes en cada uno de los 50 estados.
EFE